Discuten en el Vaticano sobre la marginación
El papa Francisco inauguró ayer un busto de bronce en honor al papa emérito Benedicto XVI. En la foto está junto al Monseñor Marcelo Sánchez Sorondo.. (Foto: AP )
Ciudad del Vaticano.— Con un saludo del cardenal Peter Turkson, presidente del Pontificio Consejo de Justicia y Paz, inició ayer el encuentro mundial de los Movimientos Populares, cuyos participantes serán recibidos hoy por el papa Francisco con quien, según los organizadores, intercambiarán opiniones por espacio de dos horas.
“Si con este encuentro logramos mejorar la situación de los trabajadores excluidos, de los campesinos sin tierra y de las personas que viven en casas ocupadas, estaremos de verdad contentos”, dijo Juan Grabois, de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular de Argentina, uno de los promotores del encuentro organizado por el Consejo de Justicia y Paz.
Grabois, quien ya en agosto pasado había conversado con el Papa en la residencia de Santa Marta sobre los grandes problemas sociales actuales, que son el tema del encuentro, comentó que uno de los objetivos es construir plataformas de trabajo conjunto entre las organizaciones que se encuentran en Roma.
Dijo que no obstante la diversidad de esas organizaciones, con la ayuda del Papa y de la Iglesia “podremos ser más coherentes”.
“Escuchar a todos no hace mal”. Parafraseando a Francisco, Grabois expresó que era “mejor iniciar procesos, que ocupar espacios, aun cuando no podamos controlar los resultados de estos procesos. Escuchar a todos no hace mal, ya que sólo así podemos conocer las cosas que tenemos en común”. Agregó que durante su intervención tocó el tema de los trabajadores, porque había muchos amigos de América Latina, como los “cartoneros”, vendedores ambulantes y personas que se han inventado nuevas formas de trabajo, y por ello “hablé de estos temas y de la relación entre estas nuevas realidades y el pensamiento social del papa Francisco”.
Monseñor Marcelo Sánchez Sorondo, canciller de la Pontificia Academia de las Ciencias Sociales, informó a Radio Vaticano, que también se habló de los diversas maneras de afrontar los problemas que causan la marginación y la explotación en el mundo.
“Como los problemas de hoy son muchos y muy serios, el Papa quiere conocerlos para así buscarles una solución adecuada”, explicó Sánchez Sorondo, poniendo como ejemplos los temas de la educación y la eliminación de las nuevas formas de esclavitud.
Hizo saber que la Academia de las Ciencias había invitado a líderes religiosos y políticos a hacer una declaración al respecto.
Recordó que los Movimientos Populares representan casi una tercera parte de la población mundial y que los mismos, gracias a su esfuerzo, no sólo “resuelven muchos problemas”, sino que con sus acciones también es posible hacer una gran obra de “integración e inclusión en el mundo”.
El momento culminante de este encuentro de tres días tendrá lugar hoy, cuando el Papa, en el “Aula Vieja del Sínodo”, dialogará con los participantes, los cuales, como explicó el Vaticano, representan “una nueva realidad al reunir a trabajadores precarios, a los de la llamada economía informal, migrantes, indígenas, campesinos sin tierra y habitantes de las zonas periféricas de las grandes ciudades”. Entre los asistentes se halla el presidente boliviano Evo Morales, quien hablará sobre el tema “Plurinacionalidad, Estado y Movimientos Populares” en la sede de la Academia Pontificia.
El mandatario boliviano también sostendrá una reunión privada con el papa Francisco para hablar sobre el desarrollo de los movimientos sociales en Bolivia.