Desvío en Petrobras asciende a 9 mmdd
Sao Paulo.— Autoridades brasileñas investigan transacciones sospechosas vinculadas a Petrobras por nueve mil 100 millones de dólares, mientras expertos señalan que la corrupción podría generar pérdidas multimillonarias para la empresa. Una fuente familiarizada con la situación aseguró ayer que, tras una investigación interna, la petrolera estatal brasileña despidió a uno de sus ejecutivos por supuesta corrupción e identificó a cerca de 15 empleados más que también estarían implicados en contratos irregulares con suministradores.
El Consejo de Control de las Actividades Financieras (COAF) señaló que las empresas y funcionarios investigados en la Operación “Lava Jato” (Operación Limpieza), lanzada en marzo y destinada a combatir el desvío de dinero de la petrolera, movieron unos nueve mil 100 millones de dólares en transacciones de dudosa legalidad. Todo ello entre 2011 y 2014, según el COAF, un organismo dependiente del Ministerio de Finanzas.
De esa cifra, unos 350 millones de dólares habrían sido movidos en efectivo, en forma de reintegros y transferencias, probablemente para hacer frente al pago de “propinas” que se supone eran para altos funcionarios de Petrobras y formaciones políticas, a cambio de obtener contratos de suministro con la petrolera.
Entre estas formaciones políticas figura el Partido de los Trabajadores, de la presidenta Dilma Rousseff, quien volvió esta semana de un viaje a Australia para participar en la cumbre del Grupo de los Veinte (G-20) y el martes se reunió durante 10 horas con sus asesores para abordar el tema.
Los resultados parciales de una investigación interna de Petrobras fueron presentados el viernes en la junta directiva, donde el ejecutivo cesado fue identificado como parte del departamento de ingeniería de Petrobras, indicó la fuente, que pidió permanecer en el anonimato. “No es sospechoso de irregularidades, es mucho más que eso. Le han hecho objetivamente responsable tras la investigación”, dijo la fuente.
Ayer mismo, el juez Sergio Moro liberó a 11 de las 24 personas detenidas por este escándalo, por considerar que no pondrían en riesgo la investigación mientras el juicio está pendiente. Los 11 son ejecutivos de compañías de construcción que supuestamente sobornaron a funcionarios de Petrobras.
En Estados Unidos, Petrobras enfrenta una investigación civil y otra criminal del departamento de Justicia para dilucidar si funcionarios de la empresa —que cotiza en la Bolsa de Nueva York— infringieron las leyes estadounidense contra la corrupción internacional. Agencias