OSO, Washington (Agencias).— La cifra de muertes por el colosal deslave del sábado en el estado de Washington subió a 14, informaron ayer autoridades. La portavoz de la policía de Snohomish Shari Ireton declaró que las cuadrillas de búsqueda y rescate hallaron otros seis cadáveres, lo que eleva a 14 el número de muertes confirmadas; se desconoce el paradero de cientos de personas.

Elementos de rescate trabajaban intensamente para ubicar más cuerpos sepultados por los desperdicios.

Al menos 49 viviendas fueron destruidas y dañadas por el deslizamiento de tierra, ocasionado por intensas lluvias que derrumbaron diques a lo largo de la autopista estatal 530 cerca de Oso, unos 90 kilómetros al noreste de la ciudad estadounidense de Seattle, el sábado pasado por la mañana.

La búsqueda de las víctimas se retomó temprano ayer después de que unas condiciones peligrosas obligaron a los equipos de rescate a suspender sus labores al caer la tarde el domingo. Algunos trabajadores, atrapados en el barro, tuvieron que ser arrastrados por su seguridad.

El incidente provocó también que la carretera para acceder a la comunidad de Darrington fuera bloqueada, y que parte del río Stillaguamish fuera invadido por la masa de lodo.

De las 49 estructuras afectadas por deslave se cree que al menos 25 de estas eran ocupadas a tiempo completo. Las autoridades advirtieron que existen mínimas posibilidades de encontrar alguien con vida entre los escombros luego de que la basura y el lodo superó una altura de cerca de cinco metros.

Brad Owen, vicegobernador del estado de Washington. declaró el estado de emergencia en el condado de Snohomish para que se agilicen recursos.

John Pennington, director del departamento de gestión de emergencias del condado de Snohomis, declaró a su vez que varios departamentos habían recopilado denuncias, algunas específicas y otras más vagas, de 108 personas de las que se desconocía su paradero tras el desastre.

Pennington dijo que era probable que esta cifra descendiera a medida que los sobrevivientes inicialmente señalados como desaparecidos fuesen contactando a sus seres queridos. “La situación es muy desalentadora”, dijo Travis Hots, jefe de bomberos del distrito 21 del condado de Snohomish. “Todavía tenemos esperanzas. Pero hay que tener en cuenta que no hemos encontrado a nadie vivo en esa montonera desde el sábado en las primeras fases de nuestra operación”, dijo.