WASHINGTON.— Líderes políticos y activistas defensores de la causa migrante pidieron ayer al presidente estadounidense Barack Obama no ceder a las presiones de quienes le han aconsejado aplazar la implementación de órdenes ejecutivas que aliviarían la situación de millones de indocumentados ante el sistemático bloqueo de una reforma migratoria por parte de los republicanos.

Una coalición de organizaciones que incluye a los dreamers (los hijos de indocumentados que llegaron antes de los 16 años) y a congresistas como el demócrata por Illinois, Luis Gutiérrez, envió ayer un mensaje a Obama: “Es mejor que el presidente tome una decisión antes de las elecciones (legislativas de noviembre) de forma decidida y transparente”, aseguró ayer Gutiérrez en un intento por atajar las presiones de algunos en el Partido Demócrata y en el propio gabinete presidencial, que recomiendan que el mandatario anuncie las medidas hasta diciembre, para evitar la pérdida del control demócrata en el Senado.

Estos demócratas temen que las medidas que anuncie Obama, y que los republicanos definen por anticipado como una “amnistía para los indocumentados”, alejen al alectorado conservador en estados como Alaska, Arkansas, Carolina del Norte y Louisiana.

Pero la posibilidad de un nuevo aplazamiento, luego de que en mayo el presidente ordenara al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) frenar el proceso para recomendar una serie de órdenes ejecutivas, que podrían incluir la expansión del Programa de Acción Diferida (DACA) que ha beneficiado a casi 700 mil hijos de indocumentados, ha enfurecido a un considerable sector de organizaciones que ayer se declararon hartas de esperar por una solución.

“Hoy los dreamers le decimos al presidente que basta. Ya es hora de actuar para evitar que se sigan rompiendo familias y para que electorado hispano entienda que hay una clara diferencia entre los demócratas y los republicanos”, consideró Lorella Praeli, de la organización United We Dream.

Ayer mismo, 136 expertos constitucionalistas de distintas universidades de EU enviaron una carta a Obama subrayando que como presidente, tiene la autoridad legal para “usar la discreción del fiscal general como herramienta para proteger a un individuo o grupo (entre otras cosas) de la deportación”.

En tanto, un estudio del Pew Research Center reveló ayer que la cantidad de inmigrantes que residían sin autorización en EU en 2013 permaneció casi idéntica desde 2009, en 11.3 millones, pero el promedio de su estadía se elevó en casi la mitad durante la última década, para ubicarse cerca de los 13 años. El Pew detectó además un aumento en la cantidad de estadounidenses inclinados a una aplicación más severa de las leyes migratorias y de seguridad fronteriza. (Con información de agencias)