KABUL (Reuters).— Los candidatos rivales de unas turbias elecciones presidenciales en Afganistán alcanzaron ayer un acuerdo para compartir el poder, dijeron asesores, después de más de dos meses de tensión por una votación en la que cada bando acusó al otro de fraude.

La crisis ha desestabilizado a Afganistán, en momentos en que una coalición militar liderada por Estados Unidos se prepara para retirar a la mayoría de sus soldados antes de fin de año.

Equipos del ex canciller Abdullah Abdullah y del ex ministro de Finanzas Ashraf Ghani se reunieron hasta entrada la noche con representantes de Naciones Unidas para intentar cerrar un acuerdo para compartir el poder antes del anuncio de los resultados finales de la votación previsto para hoy.