CARACAS (Agencias).— El retraso del gobierno venezolano en la aprobación de divisas para importar papel periódico puede significar un “golpe fatal” para la prensa “independiente y crítica” del país sudamericano, alertó ayer la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).

“Si el gobierno venezolano no cambia su postura de no ceder a la prensa escrita la posibilidad de adquirir divisas para comprar insumo básico, esto será un golpe fatal para la prensa venezolana y terminará con cualquier voz crítica con el gobierno”, dijo a EFE Claudio Paolillo, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP.

Se trata, subrayó Paolillo, de un “sistema de censura” indirecto que podría “desembocar en una situación de catástrofe para la prensa escrita venezolana”.

La semana pasada, editores venezolanos advirtieron de que en breve tiempo los periódicos del país podrían quedarse sin papel debido a las dilaciones oficiales en la aprobación de divisas para importar este bien básico.

Ayer mismo, según informó el diario venezolano El Nacional, uno de los afectados por la crisis del papel, los diputados aprobaron por mayoría parlamentaria la instalación de la Comisión del Poder Popular y Medios de Comunicación para tratar el tema.

El diputado del estado Yaracuy por la bancada Convergencia, Biaglio Pilieri, solicitó una modificación al orden del día para incluir ese asunto, advirtiendo que hay cerca de 100 medios impresos, poco más de 80 medios regionales y un poco menos de 20 de circulación nacional, afectados por este incidente.

En tanto, el presidente venezolano Nicolás Maduro juramentó a los 29 ministros y 107 viceministros que formarán su equipo de gobierno pidiéndoles “autoimponerse” un método de reflexión-acción permanente y llamándoles al “compromiso” y al “trabajo”.

Como parte de un proceso de reorganización, Maduro aprobó la creación de más de un centenar de viceministerios, que incluyen el de la “suprema felicidad” y el de “redes sociales”, según informó la Gaceta Oficial.

El mandatario calificó de “ridículos” a a aquellos que dicen que quiere acabar con las telenovelas en el país, luego de que la semana pasada ordenara revisar el “modelo comunicacional” y la programación de todos los canales de televisión del país tras acusar a los medios de fomentar la violencia al supuestamente difundir “antivalores”.