La reina Isabel II afirmó estar "triste" por las acciones violentas de los últimos díasen las ciudades canadienses de Québec y Ottawa, que dejaron dos soldados muertos.

La monarca de 88 años de edad, quien también es jefa de Estado de Canadá, aseguró que "mi esposo y yo estamos tristes y conmocionados por los eventos en Ottawa. Nuestros pensamientos y oraciones están con todos aquellos afectados".

El soldado canadiense Nathan Cirillo fue abatido a tiros en Ottawa mientras montaba una guardia en el Monumento Nacional de Guerra.

El individuo que perpetró el ataque, identificado como Michael Zehaf-Bibeau, se trasladó después al parlamento donde se encontraban los legisladores y el primer ministro canadiense Stephen Harper.

Un policía disparó al agresor luego de que penetró en la sede parlamentaria, donde el pasado 7 de octubre los diputados votaron en favor de la incorporación de Canadá al combate internacional contra el grupo armado Estado Islámico (EI) en Irak y Siria.

El primer ministro británico, David Cameron, ofreció todo su apoyo a su homólogo de Canadá y "a los canadienses mientras enfrentan este incidente" , durante un mensaje en Twitter una horas después de que el ataque se hizo público.

El lunes pasado un joven al parecer con nexos con el yihadismo, mató a un soldado y dejó herido a otro luego de atropellarlos de forma deliberada con su coche en un pueblo de Quebec.

Este hecho coincidió con la partida de seis aviones de combate canadienses a Kuwait para sumarse a los bombardeos que la coalición internacional realiza contra el Estado Islámico en Irak.

ahd