El Papa Francisco suspendió hoy por segundo día consecutivo su agenda debido a una "indisposición no grave", confirmó la sala de prensa del Vaticano.

La suspensión incluyó la misa privada matutina en su residencia vaticana, la Casa Santa Marta, y prefirió descansar, pero mantendrá la preparación del discurso que pronunciará mañana miércoles en la audiencia general.

La víspera el pontífice canceló un encuentro privado con los integrantes del Consejo Superior de la Magistratura de Italia, también por sentirse "indispuesto", dijo su portavoz Federico Lombardi.

En los días recientes la agenda pontificia ha estado cargada de actividades, por ejemplo la mañana de este sábado sostuvo varias audiencias, incluida la del presidente de México, Enrique Peña Nieto.

Por la tarde participó en un encuentro con más de 50 mil deportistas en la Plaza de San Pedro, que incluyó un largo recorrido a bordo del papamóvil.

Al final de esa audiencia pronunció una frase que generó especulaciones respecto de su salud.

"Los bendigo y rezo por ustedes, y les pido rezar por mí, para que yo también tengo que hacer mi juego que es el juego de ustedes, ¡el juego de toda la Iglesia! Recen por mí para que pueda hacer este juego hasta el día en que el señor me llamará con él. Gracias", señaló.

Las especulaciones surgieron porque esas palabras en italiano suelen referirse a los últimos días de vida de una persona.

En la Curia Romana se interpretó ese comentario como un intento del Papa de alejar los insistentes rumores en torno a su supuesta voluntad de renunciar llegados los 80 años de edad, después de que él mismo reconoció públicamente que Benedicto XVI hizo bien al presentar su dimisión.

En el entorno cercano del pontífice minimizaron el valor de esa frase y anotaron que, más allá de sus conocidos problemas de espalda, su salud es buena como se puede constatar en sus apariciones públicas.

Este domingo Francisco tuvo también varias actividades: en la mañana celebró la misa de Pentecostés en la Basílica de San Pedro y al mediodía dirigió la bendición con el Regina Coelli desde la ventana de su estudio en el Palacio Apostólico.

Por la tarde-noche encabezó la "invocación por la paz" en los Jardines Vaticanos junto con los presidentes de Israel, Shimon Peres, y de Palestina, Mahmud Abbas.

A diferencia del año pasado, durante el próximo mes de julio el líder católico suspenderá sus audiencias generales de los miércoles a causa del intenso calor estivo que se condensa en la Plaza de San Pedro en horas de la mañana.

En agosto tampoco habrá audiencias semanales, pero aún se desconoce si tomará vacaciones. Ya en verano de 2013 descartó trasladarse a la residencia vaticana de Castel Gandolfo y prefirió permanecer en el Vaticano, pese al sofocante calor.

jram