Las autoridades chinas han detenido a un centenar de activistas y peticionarios -personas que acuden a Pekín a reclamar justicia- para evitar que pusieran en evidencia los abusos que se cometen en el país durante la cumbre de líderes mundiales del APEC, revela hoy la ONG Chinese Human Rights Defenders (CHRD) .

En un comunicado, CHRD asegura que aumentaron las restricciones a disidentes, activistas y peticionarios en Pekín, pero también en otras partes de China, bajo el pretexto de "mantener la estabilidad" durante el foro de Cooperación Económica de Asia Pacífico (APEC) , que congregó a numerosos mandatarios en la capital del 5 al 11 de noviembre.

"Mientras que los líderes mundiales se reúnen para debatir los factores de la economía, los derechos humanos se ocultan bajo la grandiosa mesa de la cena del APEC, en la que (el presidente chino) Xi recibió a Obama, Nobel de la Paz, y a Bachelet, víctima de la persecución (del régimen de Pinochet)" , señaló a Efe Wendy Lin, coordinadora en Hong Kong de CHRD.

Entre los casos registrados por la ONG, se encuentra el de la famosa activista Ni Yulan, parapléjica a causa de una paliza policial y quien fue encarcelada tras emprender una campaña para ayudar a víctimas de desahucios como el que ella sufrió.

Liberada tras pasar más de dos años en la cárcel, ella y su familia fueron puestos en arresto domiciliario desde el 11 de noviembre debido al APEC y a los intentos de algunos diplomáticos de visitarla.

Ge Zhihui, otra activista discapacitada, también fue obligada a permanecer bajo arresto domiciliario ilegal durante diez días. La policía "la amenazó en repetidas ocasiones con que la mataría" y le impidió que fuera a por comida u otros productos básicos, denuncia CHRD.

La organización también informa sobre dos peticionarios de la provincia de Heliongjiang (norte) que fueron enviados a una de las miles de "cárceles negras" que existen por todo el país, además de otros casos similares en Shanghái (este) o Wuhan (centro) , entre otros.

Algunos peticionarios, indica, protagonizaron una manifestación en las afueras de Pekín y exigieron al Gobierno que protejan sus derechos humanos y que atiendan sus reclamaciones.

La mayoría de estas personas son víctimas de la falta de independencia judicial en el país asiático, que deriva en casos irregulares y en demandas que no son atendidas, sea cual sea el problema, desde una negligencia médica a un desahucio.

Durante la cumbre del APEC, considerado el evento más importante celebrado en la capital desde los Juegos Olímpicos de 2008, las autoridades impulsaron un gran dispositivo de seguridad que incluyó fuertes medidas antiterroristas, pero también antidisturbios o contra posibles manifestaciones, para que nada alterara la agenda de la reunión, que mostró el poderío de China en el panorama mundial.

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