El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, puso hoy en duda la "proporcionalidad" de la campaña militar israelí en Gaza y criticó a las dos partes del conflicto por su falta de voluntad para evitar la violencia.

Ban, en una conferencia de prensa, consideró que la respuesta de Israel a los ataques con cohetes por parte de Hamas y a otras amenazas de seguridad "ha planteado serias dudas sobre el respeto (...) de los principios de diferenciación y proporcionalidad".

"Los informes sobre actividades de militantes no justifican el poner en peligro las vidas y la seguridad de muchos miles de civiles inocentes", señaló el diplomático, que recordó que ha ordenado una investigación sobre los ataques sufridos por instalaciones de la ONU en las que se refugiaba la población.

Las palabras de Ban llegan después de que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU haya anunciado la puesta en marcha de una comisión para investigar los crímenes cometidos en Gaza.

Por otra parte, Ban, que se mostró muy crítico con las dos partes por su "falta de voluntad" para lograr una solución al conflicto, confió en que pueda lograrse pronto un alto el fuego sostenible en Gaza.

"La última tregua lograda por Egipto para estar aguantando, pero eso no es suficiente. Espero que un alto el fuego duradero pueda alcanzarse pronto", dijo.

En ese sentido, avisó de que la actual es "casi la última oportunidad" para lograr una solución al conflicto, que según recordó ha dejado en su última crisis a unos 2 mil palestinos muertos, un 75% de ellos civiles, incluidos 459 niños.

"Más niños han sido asesinados en este conflicto de Gaza que en las dos crisis anteriores juntas", destacó.

El diplomático coreano urgió a usar el cese temporal de la violencia para dar respuesta a las "urgentes necesidades humanitarias", pues recordó que más 300 mil personas siguen cobijadas fuera de sus casas y que al menos 100 mil han visto sus hogares destruidos o dañados de forma grave.

"La mayor parte de los hogares de Gaza tienen poco o ningún suministro de agua. Los hospitales que deberían responder al desastre son ellos mismos zonas de desastre", señaló.

Ban aseguró que la ONU trabajará para reconstruir la franja, pero dejó claro que si no se da respuesta a las raíces del conflicto "otra ronda de violencia y venganza está casi garantizada".

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