MOKPO/JINDO, Corea del Sur.— Tres días después del hundimiento del barco surcoreano “Sewol”, las autoridades del país detuvieron ayer al capitán, informó la agencia e noticias Yonhap. Según el equipo de investigadores y la policía, el capitán Lee Jun-seok, de 69 años, no pilotaba la nave en el momento del accidente, sino que lo hacía la tercera oficial a bordo, una joven de 26 años con escasa experiencia.

La fiscalía solicitó la detención de Jun-seok, así como de otro miembro de la tripulación. Al capitán se le acusa de varios delitos, incluido el abandono negligente del deber y la violación del derecho marítimo. Según testimonios de supervivientes, el capitán fue el primero en abandonar el barco. Además, se pidió a los pasajeros por los altavoces que no se movieran, pese a que el barco ya estaba ampliamente escorado. Los expertos creen que la evacuación tardía hizo perder un tiempo muy valioso.

Como en el Costa Concordia

El caso hizo recordar el accidente del barco Costa Concordia, en enero de 2012. El capitán Francesco Schettino, quien abandonó el buque antes de que concluyera la evacuación, está acusado de homicidio culposo múltiple, abandono de la nave, naufragio y de no haber informado inmediatamente a las autoridades portuarias de la colisión contra el escollo que provocó el naufragio frente a la isla italiana de Giglio. Murieron 32 personas.

En tanto, el mal tiempo y las fuertes corrientes siguieron entorpeciendo las labores de rescate del “Sewol”, en el que viajaban 475 personas, de las que hasta ayer se había notificado la muerte de 28; 270 siguen desaparecidas. La guardia costera teme que muchos de los pasajeros sigan atrapados en el interior del barco.

“Las posibilidades de que todavía haya supervivientes son muy escasas”, dijo Des Ward, experto y director de Australian Marine Consultants, a la emisora Arirang.

El barco se hundió el miércoles, debido al parecer a un cambio de rumbo que se cree que hizo que los vehículos y contenedores dentro de la embarcación resbalaran, lo que llevó a que el barco se escorara.

Los familiares acusaron al gobierno de no haber hecho lo suficiente por el rescate de los supervivientes. “Nuestros hijos gritan en aguas congeladas pidiendo ayuda, por favor ayúdenles”, señalaron en un comunicado.

En el ferry viajaban cientos de estudiantes de la Danwon High School, que iban en una excursión. El subdirector del plantel, Kang Min-gyu, quien viajaba con los jóvenes y fue uno de los rescatados, se suicidó. Al parecer, se colgó de un árbol.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, envió condolencias.