JERUSALÉN.— El informe emitido por expertos forenses del Instituto de Radiofísica de la Universidad de Laussanne en Suiza sobre el supuesto envenenamiento del líder palestino Yasser Arafat, no habla de culpables, pero Israel, consciente al parecer de la tendencia casi automática palestina de culparle por la muerte del rais, ha aclarado categóricamente: si fue envenenado, no fuimos nosotros.

La viuda de Arafat, Suha, quien fue la que encargó la investigación sobre la muerte del líder de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), asegura que “hubo aquí un crimen” y sostiene que es imperativo saber quién es el responsable, aunque no ha acusado directamente a nadie.

Los expertos que investigaron el tema expresaron pesar porque la viuda no permitió en el momento de la muerte de Arafat, realizar una autopsia. Todo el estudio comenzó años después, lo cual, de acuerdo, con diferentes especialistas, convierte la investigación en sumamente problemática.

“Jamás tomamos la decisión de dañarlo físicamente”, recalcó a la radio israelí el ministro Silvan Shalom, recordando que cuando Arafat se enfermó él era uno de los pocos miembros del así llamado “gabinete de seguridad”, el marco más cercano al entonces primer ministro Ariel Sharon. “Inclusive aprobamos sin traba alguna que fuera trasladado a tratamiento a París cuando se enfermó, aunque no teníamos certeza de que las informaciones al respecto no fueran un truco para salir del sitio que le habíamos impuesto en la Muqataa”, recordó.

Shalom agregó que “esto es una tormenta en un vaso de agua... pero inclusive si fue envenenado, seguro que no por Israel; quizás otros tenían interés en hacer algo así”.

En opinión del ministro de Inteligencia de Israel, Yuval Steinitz, “esto huele a algo orquestado, algo que se suma a la serie interminable de alegatos contra Israel”.

Cabe destacar que los expertos forenses que investigaron el caso no se pronunciaron sobre posibles autores de un supuesto envenenamiento. En conversación con el portal noticioso israelí Ynet, el Dr. Ehud Neeman, experto en radicación, estimó que las informes sobre el posible envenenamiento son “totalmente fabricados”, explicando que no podría haber restos de polonio 210 si el veneno fue inyectado antes del 2004, cuando falleció Arafat. Y el portavoz de la cancillería israelí, Yigal Palmor, comentó que “aquí hay más telenovela que ciencia... el último capítulo en la telenovela en la que Suha se opone a los sucesores de Arafat”.

Por su parte, el experto en Medio Oriente de la Universidad israelí de Bar Ilan, Dr. Mordejai Keidar, recordó que “el cuerpo de Yasser Arafat y sus ropas estuvieron muchos años en manos de los palestinos, hasta que fueron tomadas las muestras”. “Pueden haber encontrado muchas cosas, pero no significa que pueda demostrarse la responsabilidad de tal o cual persona... las pruebas llegaron en este caso años después del crimen, si es que hubo crimen”, dijo.