Francia aprueba ley que castiga ir con prostitutas
REACCIÓN. Sexoservidoras protestan en París contra la ley aprobada ayer por la Asamblea Nacional, por 268 votos contra 138, que penaliza a los clientes que solicitan servicios de prostitutas. (Foto: JACKY NAEGELEN REUTERS )
PARÍS (Agencias).— La Asamblea Nacional francesa aprobó ayer una controvertida nueva ley sobre prostitución que en el futuro penalizará al cliente en lugar de a la prostituta por la práctica de sexo a cambio de dinero. Una clara mayoría de 268 diputados votó a favor, frente a 138 en contra y 79 abstenciones.
El borrador prevé una multa de mil 500 euros para quien pague por sexo o la obligación de asistir a un curso de concienciación sobre la prostitución, o bien las dos cosas. En caso de reincidencia la multa asciende a 3 mil 750 euros.
Francia siguió el camino de Suecia, el primer país en adoptar este tipo de legislación, en 1999. El número de prostitutas en las calles suecas se redujo a la mitad en una década, pero no queda claro cuántas abandonaron la prostitución o simplemente la practican en la clandestinidad. Las prostitutas francesas ya no serán perseguidas por la ley, sino que recibirán ayuda para dejar esa actividad, encontrar trabajo y casa, y las extranjeras obtendrán un permiso de residencia temporal.
Ahora, el Senado debe pronunciarse al respecto, y aunque aún no hay fecha para ello podría ser antes de junio de 2014. La ministra de los Derechos de la Mujer, Najat Vallaud-Belkacem, habló tras la aprobación de la ley de “un largo camino lleno de malicia a cada paso”.
Con este giro en la lucha contra el sexo a cambio de dinero, la legislación gala se dirige en el futuro contra los hombres. Hasta ahora sólo corrían el riesgo de ser castigadas las prostitutas, a pesar de que la prostitución en sí no está prohibida. Sin embargo, ofrecer sexo a potenciales clientes podía ser penado hasta ahora con dos meses de prisión o 3 mil 750 euros de multa. La idea es abolir esa regulación con la nueva ley.
En Francia, la nueva propuesta generó un arduo debate que involucró no sólo a los políticos, sino a famosos del país. Las organizaciones de prostitutas festejan que ya no se penalice a las trabajadoras, pero temen que, con esta ley, el negocio se vea forzado a la ilegalidad, lo que podría volver más difícil el trabajo para las mujeres afectadas.
Según un informe parlamentario, en Francia hay entre 20 mil y 40 mil prostitutas; muchas son de Europa del Este, Asia, África y Latinoamérica.
También en Alemania, democristianos y socialdemócratas planean en un futuro gobierno de coalición una reforma de la ley de prostitución, aunque menos radical que la francesa: se busca un mayor control de los burdeles, asesorías para las prostitutas y apoyo para las víctimas de la prostitución forzada. Alemania liberalizó la prostitución en 2001 con la esperanza de mejorar la seguridad y el estatus de las prostitutas.