Los fascinantes acantilados de México
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Casas espectaculares en Costa Careyes. (Foto: Costa Careyes )
A petición de nuestros lectores, que han mostrado interés en los paisajes asombrosos, hemos elegido cinco destinos nacionales que les ofrecen un panorama con impactantes acantilados en los que se ve la arquitectura natural, en algunos casos combinada con la mano del hombre.
Ixtapa, Guerrero
Conocida por sus playas, Ixtapa y el pueblo de Zihuatanejo son uno de los destinos más socorridos del país. Puedes encontrar pequeñas islas en donde las aguas son claras e incluso los pequeños peces llegan a la orilla. Uno de los sitios más llamativos es el acantilado donde se encuentra el Hotel Capella Ixtapa, un exclusivo resort. Aun si no estás hospedado en el sitio, puedes entrar a su restaurante en donde se siente la brisa del mar y desde donde la vista es impresionante, con asiento de primera fila en la puesta del sol.
Foto: Cortesía del hotel
Los Arcos, Los Cabos
La emblemática figura del Arco de Los Cabos es el lugar obligado si se quiere una foto de recuerdo del destino, para llegar a la zona es necesario abordar una embarcación en la marina. En el camino los pequeños botes son rodeados por altas estructuras de roca que hacen visible la fuerza de la naturaleza mientras las olas rompen con ellas. Los lancheros incluso les han encontrado rostros y parte del recorrido es escuchar las historias de cada uno de ellos.
Foto: Especial
Maruata, Michoacán
Si buscas un lugar casi virgen esta es la opción ideal, aquí los restaurantes se convierten en palapas en donde se prepara comida local, principalmente mariscos, mientras que el hospedaje "formal" es en pequeñas cabañas ecológicas que ha acondicionado la población local. Es más bien un destino para los aventureros que deseen acampar y dormir bajo las estrellas, disfrutar de aguas cálidas y subir a alguno de los riscos cercanos para ver la puesta del sol. Se ubica en el municipio de Aquila, a 250 kilómetros al sur de la ciudad de Uruapan. Lo integran 3 bahías.
Foto: Cortesía Turismo de Michoacán
Isla del Espíritu Santo, Baja California Sur
Hay evidencia de que los seres humanos llegaron a esta isla hace casi 40 mil años y es la más cercana a la costa de Pichilingüe, a 20 kilómetros el este de La Paz. La isla tiene una extensión de 19 kilómetros de largo y cinco de ancho. Puedes practicar actividades como nado con leones marinos, kayak, pesca deportiva, esnórquel, buceo y acampar. Además, se observan mantarrayas, delfines, tortugas, reptiles, aves y en algunas épocas del año ballenas. Forma parte del Parque Nacional Archipiélago de Espíritu Santo, Patrimonio de la Humanidad y como una Reserva de la Biósfera.
Foto: Yadín Xolalpa/EL UNIVERSAL
Costa Careyes
Localizada en el litoral sur de Jalisco, en la carretera que conecta a Manzanillo con Puerto Vallarta. Justo en el punto más alto de esta zona se ubica Costa Careyes, un complejo turístico de lujo en donde los viajeros pueden incluso rentar alojamiento tipo castillos. Los más hermosos están ubicados justo en la orilla del acantilado donde la vista se despeja hacia el horizonte. En el área puedes practicar el buceo, esnórquel, golf y de un club de polo. La zona es conocida además por ser uno de los pocos lugares en nuestro país donde desova la tortuga carey, en peligro de extinción.
Fotos: Costa Careyes
La Quebrada en Acapulco
Foto: Ramón Romero/ El Universal
Tulum, Quintana Roo
No son pocas las historias de turistas extranjeros que se desmayaban cuando llegaban al filo del acantilado de Tulum. Todo a causa de una combinación única: la selva, el mar turquesa, la playa de arena blanca y esa estructura, conocido como El Castillo que, antiguamente tuvo funciones de tipo ceremonial y que, desde la orilla de los riscos parece ser mudo guardián del paso de los años y del mar. Esta ciudad maya era una fortaleza. Se encuentra aproximadamente a una hora de Playa del Carmen en la Riviera Maya.
Foto: Thinkstock
EL destino tradicional de los capitalinos, Acapulco, ofrece uno de los acantilados más hermosos de México, con 45 metros de altura, conquistados por el hombre desde 1934, con las proezas de los valientes locales, y uno que otro aventado clavadista internacional. Por las tardes es cuando se realizan las muestras para los turistas. En el destino además puedes disfrutar de las playas, los paseos sobre la banana, actividades acuáticas y la gastronomía local: mariscos y el famoso pozole guerrerense.





