aviso-oportuno.com.mx

Suscríbase por internet o llame al 5237-0800




Hazaña de un inmortal del pitcheo

Juan Pablo Estrada| El Universal
Sábado 21 de octubre de 2006
El ´Señor Smoke´ contribuyó en el quinto juego de la Serie Mundial de 1984 para una victoria de los Tigres

Cuatro oportunos ponches del Señor Smoke en el quinto juego de la Serie Mundial de 1984 contribuían a la victoria de los Tigres de Detroit, que se coronaban por cuarta ocasión en su historia.

El serpentinero poblano Aurelio López, famoso por su bola rápida, se alzaba como el pítcher ganador en aquel juego celebrado el 14 de octubre de 1984 en el majestuoso Tiger Stadium, tras lanzar dos entradas y un tercio donde recetó cuatro chocolates, sin conceder ningún hit por parte de los peloteros que enfrentó de la novena de los Padres de San Diego.

Han transcurrido 22 años de aquella hazaña por parte del lanzador mexicano nacido en Tecamachalco, Puebla, el 21 de septiembre de 1948, y quien fue descubierto por el conjunto de los Diablos Rojos del México en 1967.

El scout de los Pingos, Ramón Chita García, apostó fuerte por Aurelio, enviándolo a la sucursal de Minatitlán, donde inclusive llegó a lanzar un juego perfecto, para un año más tarde (1968) debutar en la Liga Mexicana con la organización de los Diablos Rojos.

Dotado con un gran brazo, Aurelio fue convertido en relevista, sumando 97 victorias en su paso por la Liga Mexicana de Beisbol, en su circuito de verano, además de lanzar mil 255 innings, y ponchar a mil 22 rivales, dejando su porcentaje de carreras limpias de 3.17. En 1977 impuso el récord de 30 salvamentos.

El 29 de agosto de 1974 es contratado por los Reales de Kansas City, presentándose de inmediato (1 de septiembre) en un duelo ante los Orioles de Baltimore, sin embargo regresó con los Escarlatas luego de haber tomado parte en ocho juegos en los que se fue sin haber logrado algún salvamento.

Aurelio regresó a la Gran Carpa en 1978 con la novena de los Cardenales de San Luis, con quienes obtuvo cuatro victorias. Posteriomente fue enviado a los Tigres junto con Jerry Morales en un traspaso por Bob Sykes y Jack Murphy.

El momento cumbre vino en aquella Serie Mundial de 1984, con una rotación comandada por el recordado Jack Morris.

Esa misma campaña, el serpentinero mexicano fue electo por el equipo de la Liga Americana para el Juego de Estrellas. Inclusive la banda de rock Electric Six nombró su segundo disco como Señor Smoke en honor del pelotero poblano.

Un año más tarde se fue a la agencia libre, para posteriormente jugar sus últimas dos campañas en las Grandes Ligas con el conjunto de los Astros de Houston, novena que lo cortó el 17 de junio de 1987 después de una larga trayectoria.

Conocido en México como el Buitre de Tecamachalco perdió la vida en un accidente el 22 de septiembre de 1992, cuando conducía su auto a la altura de Matehuala, San Luis Potosí. Hombre de enorme valía que dejó huella con los Tigres, franquicia que irá en busca de su quinto título, luego de aquella serie ocurrida a mediados de lo años 80, a la cual llegaron con una ligera ventaja como favoritos.



comentarios
0