Lo sentimos reza el cartelito fijado en el portón principal de las instalaciones de La Noria, por órdenes de la FMF no habrá acceso al público. Gracias...

La segunda opción es visitar el panteón Xilotepec, que colinda con las canchas del Cruz Azul.

La misión es ver jugar a La Máquina contra el Acapulco, para saber cómo se comporta en plena pretemporada.

El camposanto capta una alta concentración de niños. La mayoría se hacen acompañar de los regalos que recibieron de los Reyes Magos: playeritas cruzazulinas, zapatos de futbol, calcetas y balones.

Algunos se trepan a la reja que divide el cementerio de las canchas y otros se suben a los mausoleos que sirven de tribuna.

El pequeño Daniel Ramírez, de 9 años, presume la playera azul que le regalaron los Reyes, y los zapatos blancos. También recibió un balón del mismo equipo, aunque prefirió guardarlo en casa.

Carlos, hermano mayor de Daniel y albañil de oficio, le sirve de guía a las instalaciones. Toda la familia Ramírez es celeste.

En el cementerio coinciden los Hernández-Martínez. Ellos visitan la tumba de la abuela, Guadalupe Martínez García, fallecida hace un año. Óscar de 6 años aprovecha y luce la playera de la selección que le regalaron los Magos, y Vicente, la del Toluca.

El pequeño Jorge Luis, de 11 años, prefiere dominar ahí ese balón que le obsequiaron.

La barra Sangre Azul también se congrega en el lugar y organiza porras que no incomodan a los muertos.

Sus pancartas dan vida a los grisáceos mausoleos. Sólo acuden 15 miembros de un grupo de 500 militantes. Se quejan de recibir pocos boletos, acaparados dicen ellos por el Gordo Ordóñez.

Ni siquiera recuerdan sus nombres. Ellos mismos promueven el alias, como La Marranita , el Paco , Kiko y Axel .

Todos ellos.. jóvenes, adultos y niños, conforman un singular grupo de animación.

El relajo les ayuda a olvidar el aburrido desempeño del conjunto titular, que en una hora ininterrumpida de juego se impone 21 al Acapulco. Los dos goles azules son del refuerzo Marco Garcés. Andrés Ortega descuenta para los del puerto.

La otra hora sirve para que corran los suplentes, entre quienes Enrique Meza ubica a Juan Carlos Cacho, Aarón Galindo y Cesáreo Victorino.

Ahí es donde se dan vuelo los azules para establecer un engañoso triunfo de 6-2. Alejandro Corona, Cacho, Luis Orozco y Victorino completan la goleada.

La práctica viene acompañada de sustos. Porque el joven Cacho sufre un golpe en el muslo, a un día de que se reporte con la selección Sub-23 de La Volpe.

Margarito González debuta con el 11 titular, pero batalla para acomodarse en la contención; Chelo Delgado se pierde tres goles frente a la puerta de Felipe Núñez, Óscar Pérez ataja dos buenos intentos y Enrique Meza deja en suspenso la incorporación de un último refuerzo. Quizá por la ausencia de los argentinos César Delgado y Luciano Figueroa.

Pero arriba de los mausoleos, los goles ilusionan a la porra, que se organiza desde abajo, en el panteón Xilotepec, donde se forma una gran tribuna...