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Acapulco.— Desde su primer partido se le notó incómodo, desganado. Y ayer, Grigor Dimitrov demostró que no llegó en su mejor momento físico para defender su título en el Abierto Mexicano de Tenis, al ser eliminado en la segunda ronda por el estadounidense Ryan Harrison.

El búlgaro, quien el año pasado se llevó el Guaje de Plata al vencer al sudafricano Kevin Anderson, se enfrentó a un rival que, sin tener nada que perder, le jugó al tú por tú pese a estar posicionado en el sitio 169 del ranking mundial. El esfuerzo mostrado durante las dos horas que duró el cotejo tuvieron su recompensa y el jugador de 22 años de edad proveniente de la calificación ya está en tercera ronda tras vencer con parciales de 5-7, 6-4 y 6-0.

“Tuve un mal partido, no hay mucho que decir, no me salieron las cosas como lo pensé y lo único que me queda es tratar de mejorar en mis siguientes torneos”, dijo Grigor, quien buscaba su primer título del año.

En el primer duelo de la jornada y con una temperatura superior a los 30 grados, el tenista tuvo complicaciones para imponer su jerarquía ante Harrison quien finalmente terminó por llevarse el primer set luego de casi una hora de partido. La frustración del número diez del mundo llegó a tanto que incluso rompió una de sus raquetas.

“Simplemente no era yo mismo, tuve momentos en los que me sentí molesto y por eso sucedió lo de la raqueta. No he jugado un buen tenis hoy y es una lástima porque realmente me gusta participar aquí”.

Ante un público incrédulo que se dio cita en el estadio principal del complejo Mextenis, el también novio de María Sharapova igualó el cotejo al imponerse en el segundo set.

En el definitivo, Dimitrov cometió error tras error, lo cual aprovechó Ryan para concretar la campanada y llevarse el partido ante el monarca defensor del torneo.

El triunfo sobre Grigor es el más importante en la carrera de Harrison, quien no ostenta ningún título profesional. El máximo logro del jugador hasta ahora es el séptimo lugar en el mundial junior en 2007.