Sí se puede con los chinos en clavados: Iván García
Video. Iván García rememora en exclusiva para EL UNIVERSAL su exitoso 2014, en el que demostró que los clavadistas mexicanos están a la altura de los mejores del mundo
Iván García El mexicano posa para la foto después de los Juegos Panamericanos de Guadalajara. (Foto: Archivo El Universal )
alejandrorodriguezd@eluniversal.com.mx
Hay satisfacción en el rostro de Iván García. Fue el único
medallista olímpico de Londres 2012 en la modalidad de clavados que inició con
el pie derecho el siguiente ciclo olímpico al lograr su clasificación a los
Centroamericanos de Veracruz 2014, donde además se colgó el oro.
El año también vio a García alcanzar una medalla de bronce
en la plataforma de 10 metros individual de la Copa del Mundo de Shanghai,
China, a mitad del año, con lo que el clavadista tapatío enseñó que su tirada es
ser un protagonista más allá de la modalidad de sincronizados.
“Se terminó el año, el cual fue redondo. Creo que fue
positivo. Lo que tenía en mente y todas mis metas las cumplí, que es lo
importante. Además, qué mejor que terminar con la medalla de oro en los
Centroamericanos y, de la misma forma empezar ya el nuevo ciclo olímpico con el
pie derecho. Estoy feliz y agradecido con todas las personas que me apoyaron”,
expresó Iván García, en su visita a las instalaciones de EL UNIVERSAL.
El clavadista de 21 años tiene un semblante diferente al de
hace cuatro años. Se muestra más sobrio y comprometido con su deporte. Admite
que haber ganado una medalla olímpica
hace dos años, (plata al lado de Germán Sánchez en los sincronizados 10m), lo
volvió un referente para las nuevas generaciones, una distinción que toma con
responsabilidad absoluta.
“Ser medallista olímpico conlleva un poco de fama, se puede
decir. Pero también mucha
responsabilidad, porque ahora siempre tengo que dar la cara por México, así
como a la nueva generación de clavadistas que viene detrás de mí y que están
confiando en verme como figura como algún día yo vi a otros deportistas como
Fernando Platas o Paola Espinosa. Ellos nunca me defraudaron y espero yo no
defraudar a los que confían en mí”, apuntó García.
Esa responsabilidad de otorgar resultados quedó latente
desde la fosa de Shangai, en la Copa del Mundo, cuando ejecutó a la perfección
sus mejores clavados para colarse en el podio entre los siempre dominadores
chinos Yang Jian y Qiu Bo.
“Fue algo histórico para mí obtener ese tercer lugar, porque
era muy difícil. Son competencias en las que si te echas un clavado un poco
mal, ya estás fuera de las medallas. Estás compitiendo contra los más fuertes
del mundo, y que un mexicano ya esté peleando las medallas, es algo muy
importante para la delegación de México y para mi equipo de clavados. Este
resultado nos señala que estamos haciendo bien las cosas y que vamos por buen
camino”, subrayó García.
Esa misma entrega la mostró en el selectivo para clasificar
a los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Veracruz 2014, en donde se colgó
el oro. Un compromiso que no se quiso perder y lo tomó con seriedad absoluta.
“Es importante y satisfactorio ganar las medallas. Qué mejor
que haya sido de oro y en México. Es diferente ganar afuera de tu país que
adentro. Te quedas con otro sabor muy diferente de la medalla. Hay que
disfrutarlo, porque son momentos que uno nunca
volverá a vivir”, agregó.
La meta ahora son los Olímpicos de Río 2016 y García va por
buen camino en su anhelo por ganar otra medalla.
—¿Qué tanta hambre tienes de otra medalla olímpica?
—¡Bastante! Gané una plata y fue lo mejor que me ha pasado.
Quiero volver a sentir esa emoción, ese sentimiento de estar en un podio
olímpico, pero ahora quiero metal dorado.