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Boca del Río.— De la sorpresa al júbilo. Así, transcurrió la primera jornada del taekwondo en los Juegos Centroamericanos y del Caribe. La cosecha nacional: tres de oro y una de bronce.

Digna aportación para el acumulado mexicano, aunque con un toque de amargura luego de que el campeón mundial Uriel Adriano fuera eliminado de manera sorpresiva en las semifinales de su categoría.

“Me siento muy mal, la verdad nunca esperé este resultado pero el taekwondo es así. Siempre he dicho que nunca se debe subestimar a ningún rival y eso me sucedió”, dijo el oriundo de Guadalajara, quien cayó ante el guatemalteco Guillermo Rodas por 4-5.

Uriel paso bye la primera ronda en la categoría de menos de 74 kilogramos y no tuvo problemas en los cuartos de final ante el colombiano Neyder Lozano al vencerlo 13-4. La tragedia para Adriano llegó al enfrentarse a Rodas, quien es un alumno del entrenador mexicano José Luis Ramírez.

Durante los primeros dos rounds ninguno de los combatientes logró concretar y fue hasta el tercer y definitivo periodo cuando ambos se lanzaron a la ofensiva.

El marcador no favoreció al mexicano quien lanzó una patada a la cabeza sin éxito y recibió una que le ocasionó una herida y sangre en el labio.

“Una pelea perdida define dos cosas: Tu carácter, si tomas el aprendizaje a tu favor; o tu falta de, si te dejas caer. A mí, esta presea de bronce me sabe a aprendizaje, así lo tomo. Sé que había gran expectativa, pero a veces las circunstancias se tornan así y hay que seguirle”, remató Uriel con ojos llorosos.

Las debutantes regionales Ana Olivan, Anel Félix y el medallista mundial César Rodríguez sí cumplieron. Los tres se coronaron campeones al imponerse en las categorías de -46 kg, -62 kg y 54 kilogramos respectivamente.

“Me siento muy contento, dedico esta medalla a todos los que me ayudaron y a mi familia que siempre respalda todos mis sueños”, dijo César, quien derrotó en la final a Claiver Olaizola, de Venezuela, por un aplastante 11-1.

Ana y Anel sorprendieron pues a pesar de participar por primera vez en unos Centroamericanos, lograron el título tras vencer a Luz Cárdenas, de Colombia (1-8), y a Yudi Pérez (10-6), también cafertera.

“Creo que la clave fue que no me puse nerviosa. Me sentí muy animada con el apoyo del público y eso fue fundamental para llevarme la medalla de oro”, dijo Anel.

Las banderas tricolores ondearon todo el tiempo en las gradas del WTC, siempre agitadas por cientos de aficionados que animaron a los anfitriones.

El momento de la premiación fue la culminación de un sueño para los nuevos campeones regionales y un momento de reflexión para Adriano.

En las gradas, Jesús Mena, titular de la Conade, Carlos Padilla, presidente del Comité Olímpico Mexicano y el ex monarca olímpico Guillermo Pérez celebraron las medallas.