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MADRID.— El Real Madrid goleó al Elche (3-0) y se colocó transitoriamente líder en solitario de la Liga española, a esperas de la respuesta del Atlético de Madrid, que hoy visita al Osasuna. El Barcelona, con su derrota ante la Real Sociedad (1-3), empieza a perder la batalla por el cetro local.

El equipo blanco, que suma 63 unidades (tres de ventaja sobre Colchoneros y blaugranas), no falló; alargó a 26 su racha de encuentros sin perder, si se toman en cuenta todas las competiciones.

Asier Illarramendi marcó al 34’, mientras que Gareth Bale (71’) e Isco Alarcón (81’) ampliaron la ventaja en la segunda parte, para certificar el tercer triunfo del Madrid en los tres partidos ligueros disputados sin su astro Cristiano Ronaldo, quien reaparecería el próximo fin de semana contra el Atlético.

Pendiente también de jugar el miércoles, ante el Schalke 04, por la Liga de Campeones, el director técnico Carlo Ancelotti dejó en la banca al defensa central Sergio Ramos, para evitar que sumara su quinta tarjeta amarilla, significativa de sanción, y asegurar así su disponibilidad para el clásico madrileño.

En el arranque, el Elche presionó la salida de balón del Madrid con cierta efectividad, pues los blancos, una vez superada la primera línea, abusaban del pase horizontal en el manejo de dos organizadores de parecido perfil, como los son Xabi Alonso e Illarramendi.

El ariete Karim Benzema, muy participativo, generó una buena ocasión en disparo raso, mas fue bien atajado por Manu Herrera. El francés se asoció a menudo con Bale, quien intentaba romper por velocidad en banda derecha, y el argentino Ángel Di María, de nuevo en rol de extremo afilado.

Falto de colmillo y pretensiones arriba, el Elche intentó cubrir su espalda, pero cayó víctima de una jugada a balón parado y cierto infortunio, ya que el balón empalmado por Illarramendi, tras servicio de Di María, resultó claramente alterado por Manu Del Moral durante su camino a la red (34’).

Necesitado de puntos, el conjunto visitante dio un paso adelante tras el descanso, con el permiso del Madrid, que apenas hilvanó jugadas de mérito... Hasta que apareció Bale para cabecear una diagonal de Illarramendi y finalmente sentenciar el partido con una exhibición de su zurda. Golpeo limpio, lejano y letal del balón, suficiente para superar el vuelo de Herrera y tocar el travesaño antes de caer en el arco.

Di María y Benzema cocinaron el tercero, profundizando por banda izquierda para asistir a Isco, quien batió al arquero.

El trámite fue completado por un equipo que luce en gran forma. Sí, el Madrid es quien manda hoy.