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PORLAMAR, Venezuela.— El primer bicampeonato de México en Serie del Caribe se encuentra a la vista. En un encuentro dominado por el pitcheo, los Naranjeros de Hermosillo dejaron en el terreno a los Tigres del Licey, al derrotarlos 3-2 y con ello acceder a la final del Clásico caribeño.

Durante todo el encuentro, el conjunto que comanda Matías Carrillo supo venir de atrás para anotar en la novena entrada la carrera que le otorga a México la posibilidad de refrendar el título conseguido el año pasado, justamente en Hermosillo.

La parte baja del último capítulo comenzó con sencillo de Yunesky Sánchez. Enseguida, el piloto mexicano mandó toque de sacrificio que resultó a la perfección al adelantar a Sánchez y embasarse Luis Fonseca. Con corredores en primera y segunda, el receptor Sebastián Valle se paró en el plato y ante el pronóstico de otro toque, sacó el bat y disparó sencillo que partió el diamante y el corazón de los dominicanos, que vieron en los spikes de Yunesky Sánchez la carrera del triunfo mexicano.

El triunfo fue para el ligamayorista Óliver Pérez, quien en una entrada de labor sólo regaló una base por bola y ponchó a un enemigo.

Por su parte, la derrota cayó sobre la espalda de Guillermo Mota, quien no pudo frenar la ofensiva mexicana.

La novena sonorense recibió daño desde la primera entrada luego de que el abridor Alfredo Aceves dio un pelotazo al primer bateador Leury García, quien después de robarse la segunda almohadilla timbró la carrera de la quiniela con una rola al cuadro del jardinero Juan Pérez.

Los Naranjeros respondieron de inmediato con sencillo de Jon Weber, que envió al plato a Chris Roberson, con la carrera que emparejó hasta ese momento la pizarra.

Con defensiva, pero sobre todo brazo, Alfredo Aceves y Yunesky Maya se trenzaron en un duelo de pitcheo que duró hasta el inicio del séptimo rollo, cuando Dominicana se volvió a poner al frente con una carrera.

México empató de nueva cuenta en la octava.

Hermosillo espera al ganador de la semifinal de Venezuela y Puerto Rico.