El clima "benévolo" permitió la diversión
AMBIENTE. Los aficionados al Super Bowl hicieron ayer una fiesta en las inmediaciones del inmueble. (Foto: SETH WENIG AP )
marco.sotelo@eluniversal.com.mx
SECAUCUS, NUEVA JERSEY.— El clima fue el tema desde que la NFL otorgó la sede del Super Bowl a Nueva York. Mucha tinta y horas de aire en radio y televisión se gastaron hablando de eso.
El día del juego, aficionados jubilosos vestidos con los colores de sus equipos, llegaron como una oleada al MetLife Stadium para un Super Bowl que se dasarrolló bajo condiciones meteorológicas inusitadamente “benévolas”.
La mayoría de los aficionados se mostró de buen humor, pese a las largas filas y los estrictos procedimientos de seguridad por los que tuvieron que pasar.
En las afueras del estadio poco a poco se congregaron los más de 82 mil espectadores. Las filas para el ingresoeran enormes, tan sólo comparables a las que se formaron en los expendios de cervezas.
Las porristas de los Jets de Nueva York, llamadas “Flight Crew”, vestidas con overoles verdes, deleitaron a los visitantes con sus rutinas de baile y canciones de Guns N’ Roses, como la de Welcome to the Jungle. Y tan sólo tres ellas hicieron una interpretación de danza contemporánea con pasos más elaborados.
Una banda escolar de percusiones también cooperó para poner de buen ánimo a los aficionados de la NFL. Con su contagioso ritmo marcharon por todos lares e invitaron a llos que se congregaron a seguirlos con aplausos.
Las tiendas de recuerdos se abarrotaron. La gente ávida de un souvenirs adquiría desde gorros de 25 dólares hasta sudaderas de 95 con algún estampado del Super Bowl.
Los gritos y las porras. A cada “Seaa… Haaawks!”, respondía un “let’s go Broncos!” y así sucesivamente hasta que se encontraban de frente, se reían e intercambiaban abrazos o chocaban las palmas.
A un costado del acceso principal al estadio se encontraban varias esculturas de hielo con las imágenes del casco de los Broncos, de Seattle, con el logotipo de Super Bowl XLVII y las iniciales de las ciudades de Nueva york y Nueva Jersey, sudaron gota a gota en espera del kickoff.
En otro sector aledaño del estacionamiento, sobre un escenario, una banda de blues interpretó sus melodías para quienes gustan de un sonido un poco más relajante antes de ingresar a las gradas para desbordar toda la adrenalina acumulada para el “gran juego”.
El único problema para los espectadores que llegaron en tren fue en la estación de Seacaucus Junction, el comienzo de una línea de 11 kilómetros que llega hasta el estadio. Los usuarios tenían que pasar por un retén instalado por personal de la Agencia de Seguridad en el Transporte.
Personal de emergencias dijo a que varias personas requirieron atención médica tras desmayarse cuando se saturó la estación.
“Era como un cuello de botella”, explicó Will Smith, vocero de NJ Transit, la empresa de transporte público de Nueva Jersey.