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MANCHESTER.— Si no supera hoy el 2-0 recibido en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones ante el Olympiakos, el Manchester United podría enfrentarse a la certeza de una temporada no sólo sin títulos, sino incluso sin clasificación a competiciones europeas.

La presión sobre el entrenador escocés por la crisis deportiva es fuerte, pero crecerá aún más si se consuma la eliminación este día.

Pese a ello, Moyes aseguró ayer que su trabajo como técnico del United está a salvo y el club va a “levantarse de nuevo”, después de su lamentable primera temporada en el cargo.

Moyes, quien sustituyó en julio a Alex Ferguson, dijo que no ha tenido conversaciones con la junta del United sobre su futuro porque “este no es un club que trabaja con una visión a corto plazo, es una a largo plazo”.

Dortmund, a redondear

En el otro duelo de hoy, el Borussia Dortmund recibe al Zenit y espera aprovechar la ventaja de 4-2 de la ida en San Petersburgo para acceder a cuartos por segunda vez consecutiva.

“Si no aprovechamos esta posición de salida, seremos nosotros los culpables”, aseguró el capital del equipo alemán, Sebastian Kehl.

Siempre que se trata de Europa, el Borussia Dortmund muestra otra cara. A diferencia de lo que sucede en la Bundesliga, el equipo de Jürgen Klopp sueña con celebrar sus logros en la Liga de Campeones y alcanzar así los cuartos de final.