Derby en la final de Copa del Rey

PRESENTE. Lionel Messi, con su gol, le dio tranquilidad al Barcelona. (Foto: ÁLVARO BARRIENTOS AP )
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Hay clásico. El Barcelona se clasificó para la final de la Copa del Rey al empatar 1-1 con la Real Sociedad, y así, con un global de 3-1, asegurar el “Superclásico” español, contra el Real Madrid, en el juego programado para el próximo 19 de abril.
El mexicano Carlos Vela fue titular por la Real, teniendo una buena actuación. Mandó un balón al larguero y en otra oportunidad se topó con una gran atajada del portero culé Pinto.
La eliminatoria quedó marcada por el 2-0 de la ida y en la vuelta el Barcelona evitó nervios para con un tanto de Lionel Messi (27’), definir la eliminatoria. Antoine Griezmann (87’) impidió la derrota local.
Y hay clásico.
El Real Madrid jugará su tercera final de Copa en cuatro temporadas y el Barcelona participará en su cuarta en seis años. Hace tiempo que los dos equipos se toman muy en serio el torneo.
El partido de Anoeta no respondió al guión inicial previsto. El conjunto local optó por refugiarse atrás, entregar todo el campo al Barcelona. El equipo azulgrana supo leer lo que necesitaba el encuentro y dominó la pelota a placer.
El gol sólo era cuestión de tiempo. José Angel le regaló el balón a Messi. La defensa, como si quedara hechizada, no puso oposición en la carrera y el delantero disparó casi por obligación. Gol del Barcelona y eliminatoria terminada.
La Real Sociedad sólo tuvo una buena oportunidad en la primera parte, con un balón llovido hacia Carlos Vela, que el mexicano golpeó sin acierto. Y nada más.
Vela fue lo mejor del equipo local. El tricolor creó una maravilla con un inverosímil disparo desde un lateral que se estrelló en la madera.
Ya sin presión, el encuentro dejó espacios para los dos equipos y hubo ocasiones de marcar, pero la falta de tensión también se apoderó de los delanteros. Al menos, los locales se fueron con el orgullo de no caer, gracias a un tanto de Griezmann.
Así concluyeron unas semifinales extrañas, en las que apenas hubo emoción cuando los enfrentamientos sugerían lo contrario.
Si el Madrid se deshizo con placidez del Atlético, algo parecido ocurrió con el Barça ante la Real. Cabe esperar algo muy diferente para la final, aunque faltan dos meses.
Barcelona y Real Madrid se enfrentarán por séptima vez en la final. Los títulos se han dividido por partes iguales, tres para cada uno.





