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ATLANTA.— Cada atajada de Guillermo Ochoa aceleró su ritmo cardiaco, fue una reacción instintiva. La adrenalina fluyó, al igual que el deseo de mostrar que pueden ser igual de efectivos bajo los tres postes nacionales.

Moisés Muñoz y José de Jesús Corona no se sienten derrotados por Guillermo Ochoa dentro de la batalla en pos de ser el arquero de la Selección Mexicana en Brasil 2014. Ambos reconocen y hasta se alegran por la exhibición del meta del Ajaccio ante Nigeria, mas advierten que sólo se trata de un nuevo episodio en la historia que culminará dentro de poco más de tres meses.

Hasta recuerdan que no es asunto de tres. Alfredo Talavera, no convocado para el choque con las Águilas Verdes es otra opción de Herrera.

“Ninguno de nosotros nos hemos sentido seguros en algún momento”, sentencia el portero del América. “Jamás hemos declarado eso ni Chuy, ni Talavera, ni Memo, ni un servidor”.

“La pelea ha estado cerrada durante ya mucho rato y, al final, la decisión la tiene Miguel; nosotros, lo único que debemos hacer es mantener el nivel que hemos enseñado”.

Con lo que elevarían aún más el grado de dificultad para 'El Piojo'. Se trata de una competencia en dos fases: la primera estriba en dejar a uno fuera de la nómina mundialista, en la segunda se debe elegir al titular.

Ochoa tuvo una mágica velada sobre el lienzo verde del Georgiadome, recuperó parte del terreno perdido. Corona lo sabe, así es que promete máximo esfuerzo para no rezagarse, en una carrera que hace tiempo lideraba sin mayores problemas.

“Conozco bien [a Guillermo] y qué bueno por él, me da gusto”, afirma el cruzazulino. “Va a ser muy importante seguir trabajando, para él y todos nosotros… Esto nos va a obligar a no relajarnos”.

La única desventaja para el ex azulcrema es que ya no tendrá posibilidad de mostrarse en la Selección antes de que sea elaborada la lista de los 23 guerreros que acudirán al gigante sudamericano. Corona, Muñoz y Talavera, aún cuentan con el amistoso del 2 de abril, en Phoenix, contra Estados Unidos. Noventa minutos que ofrecen la posibilidad de terminar de seducir al estratega.

José de Jesús lo toma con calma. Le agradaría experimentar la satisfacción que genera jugar un Mundial, mas recuerda que la palabra final no saldrá de su boca.

“Esa va a ser decisión del director técnico. Vamos a seguir trabajando”, atina a decir. “Siempre se ha demostrado calidad y capacidad en esta posición. Lo demás, no está en nuestras manos. Simplemente, [hay que] trabajar y seguir adelante”.

Postura compartida por Muñoz, quien recuerda que el Tricolor será el principal beneficiado por la sui géneris batalla.

“[Vi a Ochoa] muy bien”, admite. “Definitivamente, hay gran nivel en la portería mexicana y esta competencia por ese puesto ha estado así durante ya mucho tiempo, lo cual es bueno para todos, porque –a final de cuentas— la Selección va a contar con un excelente portero en el Mundial, sea quien sea”.

“Hay muy buen nivel en todas las posiciones. Se ha hablado mucho de la portería, porque únicamente son tres lugares para cuatro arqueros, quienes estamos en la competencia, pero en todas las líneas hay muy buena lucha, nivel. Por eso, podemos estar seguros de que va a haber una buena participación de la Selección Mexicana en el próximo Mundial”. Y espera que sea con él como guardameta.