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SAN ANTONIO.— La vara la puso muy alta su padre: “o gana o se retira del boxeo”. Y por ello, El Hijo de la Leyenda Julio César Chávez Jr. prometió que será una revancha explosiva la que sostenga con el estadounidense Brian Vera, cuando se midan mañana en el Alamo Dome.

Chávez Jr. y El Guerrero Vera, acudieron la tarde del jueves a la última conferencia en el Market Square del centro de San Antonio.

Julio César Chávez Carrasco cargó en sus brazos a su hija Julia, de dos meses de edad, y mencionó que en la primera pelea hubo mucha controversia, “mucha gente no quedó conforme con el resultado, es por eso que estamos haciendo esta segunda pelea”, expresó.

El sinaloense agregó, “Vera es un verdadero guerrero, lo demostró esa noche en California, pero estoy dispuesto a darle a ustedes una gran pelea. Los ganadores la noche del sábado van a ser los aficionados, porque vamos a darles un gran espectáculo. Una de las mejores peleas del año”, aseguró.

“Me motiva mucho a sacar el resultado, no estoy nervioso, tengo que sacar lo que sé. Tengo la capacidad y sé hacer mi trabajo”, sostuvo el ex campeón mundial medio.

Por su parte, Brian Vera comentó que ya dejó en el pasado la primera batalla que tuvo con Chávez y en la cual fue diagnosticado como el ganador, a pesar de las tarjetas que dieron los jueces.

“No quiero hablar demasiado sobre la primera pelea, lo único que me preocupa es salir y ganar. Tuvimos un gran campo de entrenamiento y verán un buen combate el sábado. Estoy listo para triunfar”, comentó Vera.

El entrenador Vladimir Baldenebro y el preparador físico tienen confianza en el entrenamiento que realizó Julio César Chávez Carrasco, para su pelea de revancha.

Baldenebro, de 33 años, se inició como manoplero del hijo del legendario Julio César Chávez y como entrenador será el responsable de dirigir al Junior en el pleito de mañana en San Antonio.

“Venimos bien preparados, para mí es una responsabilidad entrenar a Chávez, porque acapara la atención del mundo boxístico, pero me siento capaz de salir adelante”, expuso el entrenador sinaloense.

Mientras que el preparador físico Luis Cornejo resaltó que el sinaloense no tendrá problemas para marcar el peso supermedio que indica 168 libras, para el desquite ante Vera, después de su polémica victoria en septiembre en California.

“Julito está muy bien de peso, se trabajó resistencia, fuerza y velocidad y subirá al ring al ciento por ciento. Todo va de acuerdo con lo que se planeó”, dijo Cornejo.