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Enrique Borja era el hombre de los goles imposibles. El Cyrano, como se le llamaba por su prominente nariz, hacia anotaciones de cualquier ángulo, pegándole al balón con cualquier parte del cuerpo.

Muy similar a lo que sucede con Javier Chicharito Hernández.

Ahora que El Chícharo ha entrado en momentos de crisis, que se le ha cerrado el arco, le aconseja no darse por vencido, e insistir, “porque los goles pronto van a comenzar a caer”.

“Esto se lo he dicho al mismo Javier. Hay que estar en el sitio justo a la hora exacta. Si lo han visto, ya llega a las pelotas, ahora sólo falta que el balón entre”, agrega Borja. “Para mí, Javier está muy cerca de encontrar el gol”.

En los últimos juegos de la Selección, “lo he visto mucho mejor. Además de estar en el área, busca a sus compañeros y sabe dar pases para anotar”.