Fracasa Chivas y queda fuera de la Liguilla
ELIMINADAS. Las Chivas Rayadas del Guadalajara no jugarán la Liguilla. (Foto: Imago7 )
cesar.huerta@eluniversal.com.mx
La desesperación de Chivas ha llevado a los
futbolistas casi a los golpes entre ellos mismos. La escena de Omar
Bravo dando un empujó a Patricio Araujo habla por sí sola. La escuadra
tapatía ha concretado el fracaso. Porque al hecho de
quedar eliminado por tercera campaña consecutiva no se le puede llamar
de otra forma. El 0-1 ante Monterrey ha dictado sentencia.
Apenas una semana atrás, el Guadalajara se veía
casi eliminado del Torneo Clausura 2014. El destino no estaba en sus
manos. Necesitaba una combinación de resultados. Y estuvo al pendiente
de sus adversarios en la lucha por la calificación:
perdieron Atlas y Morelia, sólo ganó el Pachuca. El "milagro" ocurre.
Chivas llega al Estadio Omnilife como dueño de su futuro.
Si gana, estará en la Liguilla por el título.
Cualquier otro resultado lo deja fuera. Sin embargo, parece que el
equipo no tiene consciencia de ello. Durante la primera parte, el cuadro
tapatío vive los peores minutos desde la llegada
del argentino Ricardo Antonio La Volpe. Y no por el marcador, que se
mantiene sin movimiento, sino por el triste accionar.
El Rebaño Sagrado salta al césped de su propia
casa como un equipo carente de ambición. Como si no supiera lo que se
juega. Sin hambre. Sin deseo. Sin idea. Muy distinto a las primeras tres
actuaciones bajo el mando de su nuevo estratega.
Guadalajara requiere la victoria para cortar con la sequía de dos
torneos sin calificar, pero hace muy poco por buscarla.
Monterrey, por su parte, tiene un panorama mucho
más complicado. Sólo una victoria por siete goles de diferencia le
permitiría desbancar a León como octavo de la clasificación. Misión
imposible. Pero busca con mucho mayor ahínco el resultado
positivo en cancha ajena. Se apropia del balón y genera las mejores
aproximaciones.
Pero Chivas, que de medio campo hacia el frente
es un desastre, tiene un "salvador". Néstor Vidrio pierde el esférico en
la salida. Humberto Suazo lo controla. Recorre hacia el centro. Se
quita marcas y saca un disparo raso y potente.
Antonio Rodríguez se tiende hacia su izquierda y desvía, al '14.
Poco más tarde, Lucas Silva controla afuera del
área. El zurdazo lleva colocación y toda la intención de poner al Rebaño
Sagrado contra la pared. Un rápido viaje del balón rumbo al arco. El
portero rojiblanco vuela una vez más, a su derecha.
Alcanza la redonda. Manotazo para enviar a tiro de esquina, al '27.
"Toño" ya es factor en este duelo de la fecha 17.
Sólo hasta los instantes finales de la primera
parte, el cuadro local recuerda que en juego está toda la temporada.
Muchas veces, la diferencia entre fracasar o no es simplemente acceder a
la Liguilla. Chivas necesita esa calificación
para dar tranquilidad al nuevo proyecto. Pero su reacción es apenas
tibia. Alcanza únicamente para un cabezazo de Aldo de Nigris, por
encima, al '41.
Con el silbatazo del árbitro, se desata lo
inesperado. Guadalajara es una olla de presión, que explota de camino al
vestidor. Patricio Araujo se acerca reclamando a Omar Bravo. El capitán
responde a su compañero con un empujón. Gritos
enérgicos. El arquero Antonio Rodríguez corre para detener al "Pato"
que intenta contestar la agresión.
David "Avión" Ramírez abraza a Bravo y lo aleja
de la escena. No pasa más. Los han detenido a tiempo. Pero la grotesca
escena es muestra clara de la tensión que se vive en la cancha, ante la
inoperancia exhibida durante los primeros 45
minutos.
En la segunda parte, un cambio de actitud es
obligado. Se ve de arranque. Un centro por izquierda es cabeceado por
Aldo de Nigris. El remate es picado y cruzado. Difícil para el arquero.
Pero Jonathan Orozco se tira a su izquierda. Aparece
de la nada. Atajadón del visitante, que se salva al '48.
No queda más. Chivas se tira al frente en busca
de la victoria. A esta altura, lo mismo da perder que empatar. Ambos
resultados lo dejan fuera de la Liguilla. Sólo sirve ganar. Y en esa
intención, deja espacios atrás. Monterrey los aprovecha.
Neri Cardozo golpea de lejos. El esférico supera a "Toño" Rodríguez,
que estaba adelantado. El travesaño mantiene a los locales con vida, al
'64.
Con la entrada de Carlos Fierro, el debutante
Diego Hernández y Jesús "Chapo" Sánchez, el Rebaño Sagrado desarma
completamente su medio campo. Omar Bravo termina el partido jugando como
contención.
El equipo se vuelca al frente. Algo genera. Un
cabezazo de Aldo de Nigris, que Néstor Vidrio no alcanza a empujar
('75), una pelota filtrada que Diego Hernández desperdicia con un
zapatazo desviado ('78) y un testarazo del "Chapo", que
muestra su falta de oficio en esos menesteres y vuela el esférico
('79). Con eso no alcanza.
Tiro de esquina por el costado izquierdo.
Humberto Suazo se acerca al banderín. El chileno es el cobrador
habitual. Pone una pelota precisa. Guadalajara se pierde en la marca.
Efraín Juárez salta y conecta con la cabeza. Sólido. Al fondo.
Estremece las redes y destroza las ilusiones rojiblancas. Gol de los
Rayados, al '84, que acaba con la temporada tapatía.
Los aficionados rojiblancos buscan ya las
escaleras. Abandonan el Estadio Omnilife. El Rebaño sagrado agoniza. El
único intento de reacción es apagado con otra gran atajada al '87 de
Jonathan Orozco, a disparo de Aldo de Nigris. No hay
más. El fracaso está consumado: Chivas ha quedado fuera de la Liguilla
por tercer torneo consecutivo.
Monterrey se queda lejos del milagro de un 7-0.
También está eliminado. El único beneficiado de este resultado es León,
que se convierte así, en el octavo y último invitado a la llamada
"fiesta grande" del futbol mexicano. El Guadalajara
ha muerto. Es tiempo de empezar una nueva reconstrucción.





