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Jason Garrett, el coach de los Cowboys, debería tener esta estadística en mente cuando elabora su plan de juego en la semana: Dallas tiene marca de 12-1 cuando DeMarco Murray corre con el balón en 20 o más ocasiones.

Leíste bien: doce triunfos y una sola derrota. Contundente.

Ayer, en Tennessee, Murray impuso una marca personal con 29 carreras, que se tradujeron en 167 yardas, suficientes para dominar a los Titans y vencerlos a domicilio, 26-10.

Fue el segundo juego consecutivo de Murray con 100 o más yardas, apenas el tercer corredor en la historia de los Cowboys que lo logra en los dos primeros juegos de una campaña. Emmitt Smith lo hizo en tres ocasiones y Tony Dorsett, dos.

Y si Dallas es capaz de correr el balón como lo hizo ayer (220 yardas), entonces no pone su destino en manos de Tony Romo, un veterano de 34 años de edad que se recupera de una cirugía en la espalda.

Romo, además, ha demostrado hasta el hartazgo que no puede solo con el paquete, particularmente en los juegos de vida o muerte.

Y mientras Murray sumó 115 yardas tan sólo en la primera mitad, Romo pasó para 176 en todo el partido.

Y esa es la combinación perfecta para los Cowboys: menos pases de Romo y más carreras de Murray.

“Aún es temprano [en la campaña]”, dijo Murray. “Aún tenemos mucho trabajo por hacer… pero vamos en la dirección correcta”.

Así es… mientras el plan de juego de Garrett incluya más Murray y menos Romo. Esa es la clave en Dallas.

GRIFFIN III, OTRA VEZ FUERA

Robert Griffin III tiene apenas tres años en la NFL, suficientes para vivir un verdadero calvario. El quarterback de los Redskins se luxó el tobillo izquierdo durante el primer cuarto del partido ante los Jaguars de Jacksonville.

Griffin III lanzó un pase y cuando cayó, justo en la banca de los Redskins, el tobillo se le torció de fea manera. Tanto que se temía que había sido fractura.

Y eso no fue lo peor para “RG3”. Kirk Cousins, su suplente, entró y brilló de principio a fin en la ofensiva del coach Jay Gruden.

Para cuando Griffin III pueda regresar al campo (estará fuera al menos un par de meses), su lugar podría estar nuevamente en la banca, donde también terminó la campaña pasada por decisión del entonces coach, Mike Shanahan, con quien el joven quarterback tuvo sus diferencias.

Cousins estuvo brillante en el relevo. Completó 22 de 33 para 250 yardas, con dos pases de touchdown (uno justo con su primer pase de la tarde) y rating de 109.4.

Cousins no sólo entiende mejor la ofensiva de Gruden, sino que no se desespera en la bolsa de protección y se deshace rápidamente del balón. A “RG3” se le critica por hacer exactamente lo contrario.

“En momentos como este sólo te queda mantener la fe”, dijo Griffin.

Quizá la fe sea lo único que le quede al final de la temporada.

LAS LESIONES

Griffin III no fue el único de los Redskins lesionado. Washington también perdió a su mejor receptor, DeSean Jackson, quien llegó este año vía agencia libre.

Jackson se lesionó el hombro izquierdo durante ese mismo primer cuarto del duelo ante los Jaguars. DeSean espera poder jugar el próximo domingo, cuando los Redskins visitan a su ex equipo en Philadelphia.

Jamaal Charles, el estelar corredor de los Chiefs, salió del juego en Denver con una lesión en el tobillo izquierdo. Fue en el primer cuarto, cuando Charles fue tacleado por el safety T.J. Ward.

A.J. Green, receptor de los Bengals, se agravó una lesión en el dedo gordo del pie durante la primera serie ofensiva de Cincinnati y tuvo que quedarse en la banca el resto del juego.

Los Bengals también perdieron, debido a lesión, a su mejor linebacker: Vontaze Burfict (nervio del cuello).

Knowshon Moreno, corredor de Miami, se lastimó el codo izquierdo en el primer cuarto del juego en Buffalo. De hecho, se lesionó en su primera carrera, tras ser golpeado por Nickell Robey y Nigel Bradham.

GOLPE AL CAMPEÓN

Los Seahawks sabían que todos sus rivales van a dar el 150% este año. Es una de las razones por las cuales es tan complicado repetir títulos en la NFL.

Ayer los Chargers jugaron uno de sus mejores partidos en años y vencieron a Seattle en casa, la que muchos consideramos una de las sorpresas de la semana.

El héroe del partido fue el ala cerrada Antonio Gates, quien atrapó tres pases de touchdown para llegar a 90 en su carrera y superar a Larry Fitzgerald (87) y los legendarios Andre Reed (87) y Don Maynard (88). Sólo Tony Gonzalez (111) tiene más touchdowns en la posición de ala cerrada.

Philip Rivers, quien enfrente tenía a la multipublicitada “Legion Of Boom” (como se autonombró el perímetro de los Seahawks), completó 28 de sus 37 pases para 284 yardas.

Marshawn Lynch sumó apenas 36 yardas por tierra. De hecho, el mejor corredor de Seattle fue el receptor Percy Harvin, quien se escapó 51 yardas hasta las diagonales, aunque los oficiales no se dieron cuenta que pisó fuera del campo y dieron por válido el touchdown.

El próximo domingo, los Seahawks reciben a Peyton Manning y sus Broncos, en la tempranera revancha del Super Bowl XLVIII.

LOS NÚMEROS

Jordy Nelson tuvo nueve recepciones para 209 yardas (con un touchdown de 80) en el triunfo de los Packers, 31-24 sobre Jets. Esas 209 yardas fueron la mayor cantidad lograda por un receptor de Green Bay en un juego no decidido en tiempo extra, desde que Billy Howton sumó 257 yardas el 21 de octubre de 1956.

Tom Brady, quarterback de los Patriots, llegó a 149 victorias, con las que superó a John Elway (148); con marca de 149-46, Brady ahora ocupa el tercer lugar de todos los tiempos.

El coach de los Patriots, Bill Belichick, se convirtió en el sexto entrenador de la historia con 200 victorias en campaña regular. Belichick tiene récord de 200-106.

Los Browns rompieron una racha de nueve derrotas en partidos inaugurales en casa, tras vencer 26-24 a los Saints, que están 0-2 y cayeron por quinta ocasión en fila como visitantes en temporada regular.

MNF

PHILADELPHIA EN INDIANAPOLIS

Serie: 10-7 para Colts, que han ganado 4 de los últimos 5

Favorito: Colts por 3

Andrew Luck tiene una impresionante marca de 10-0 después de una derrota. Pero Nick Foles, LeSean McCoy y el electrizante ataque de Philadelphia venderá cara la derrota.

Pick: Colts 31-27 Eagles