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Pep arrebata a Mou la Supercopa
Bayern Munich conquistó su primera Supercopa de Europa, tras imponerse por 5-4 en la tanda de penaltis al Chelsea Reuters
Javi Martínez, al que Josep Guardiola sólo otorgó unos pocos minutos de juego, dio el empate al Bayern Munich en el último suspiro de la prórroga AP
Cuando el Chelsea se frotaba las manos tras lo que parecía una trabajada victoria en la prórroga, apareció el jugador español y echó todo por tierra AP
Al margen del resultado, el Chelsea de José Mourinho y el Bayern de Josep Guardiola escenificaron una final para el recuerdo, llena de detalles tácticos, y donde se ve la mano de "Pep" AP
La primera parte fue intensa, con un Bayern que tocó más de lo necesario, aunque con mucha calidad, marca "Guardiola" AP
Josep Guardiola dedicó la Supercopa lograda en Praga a su predecesor en el banquillo, Jupp Heynckes AP
"El Bayern ahora tiene todos los títulos del mundo, y estamos muy orgullosos", declaró el de Sampedor EFE
RESPUESTA. Guardiola se fundió en un abrazo con Ribéry, al igualar a un tanto. (Foto: PETR JOSEK REUTERS )
deportes@eluniversal.com.mx
PRAGA.— El Bayern Munich ganó al Chelsea una Supercopa de Europa épica que se decidió por 5-4 en los penaltis, después de que el partido terminara empatado a dos tras la prórroga y con ello Josep Guardiola superó a José Mourinho, para obtener su primer título al frente de los bávaros.
Los monarcas de la Liga de Campeones se impusieron gracias a la parada de Manuel Neuer en el último penal de la tanda al disparo de Lukaku, que fue el único de los diez lanzadores que erró.
La final fue vibrante en todo momento, pues el Bayern empató el partido 2-2 con un gol del español Javi Martínez en el último segundo del tiempo extra, en el que el Chelsea se adelantó y aguantó su ventaja con un hombre menos.
La victoria supuso una mini-revancha para el Bayern después de la derrota que sufrió ante los Blues en serie de penaltis en su propio estadio de Munich en la final de la Liga de Campeones de 2012.
El partido tuvo un desarrollo similar, con el Bayern volcado sobre la portería inglesa, pero sin precisión en el remate.
Sin embargo, en esta ocasión la suerte sonrió al Bayern y dio un respiro a Guardiola, que no sólo batió a su enemigo íntimo, Mourinho, sino que logró evitar el fantasma de una segunda derrota consecutiva en una final, tras caer en la Supercopa alemana ante el Borussia Dortmund.
El partido respondió al espíritu futbolístico de los dos técnicos: el Bayern de Pep tuvo el control de la pelota y el Chelsea de Mou se replegó a la espera de un contragolpe letal y estuvo a punto de ganar.
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