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Guillermo Ochoa expresa una risa nerviosa antes de alejarse de una polémica con José Manuel de la Torre, el ex técnico del Tri.

El Chepo dijo públicamente hace varias semanas que el portero del Ajaccio se había negado a estar con la Selección Mexicana por no habérsele garantizado la titularidad en la portería nacional. El cuestionamiento hacia el meta ahora que volvió a verstirse de verde era obvio y esperado.

—¿En verdad hubo una negativa de tu parte, Memo?

“No es momento de hablar...”, rechaza Ochoa, tras un silencio en el que se encoge de hombros.

Se le insiste en el tema. Se le pregunta si le dolieron esas palabras del que fuera entrenador nacional. François Memé siempre es mesurado, habla aferrado a un discurso que impida cualquier incendio de polémica mediática.

“Depende cómo las tomes [lo que dijo Chepo], estoy tranquilo, sé lo que hice y no es momento de entrar en polémicas ni en chismes. Yo sé mi trabajo, sé a dónde quiero llegar, en mi camino, siempre hay adversidades y nunca he dudado”, explica el perfilado a ser titular en el duelo ante Panamá del viernes.

Además, para zanjar los dimes y diretes con De la Torre se apoya en que su trayectoria en Selección Nacional ha sido de un recorrido largo en el que “me ha dejado cosas buenas, cosas malas, momentos agradables, momentos que han afectado mi carrera personal y momentos donde he hablado, momentos en los que he tenido que callar por las situaciones, porque no es el momento indicado para hacerlo, y aquí estoy con alegría, felicidad y orgullo de estar en la Selección”.

Con mayor ánimo ante preguntas más apegadas al plano deportivo, Memo quiere jugar como el portero estelar del Tri, aunque no exige ese puesto: “Siempre el que decide va a ser el entrenador, pero todos estamos listos y mentalizados para jugar o apoyar a quien juegue”.