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BARCELONA.— El técnico argentino Gerardo Tata Martino posó ayer junto al escudo del Barcelona, en las oficinas de la entidad, en su primer acto antes de firmar el contrato como técnico azulgrana, que se llevará a cabo este día.

Martino ha sentido desde el primer momento que pisó el aeropuerto de El Prat el aliento de la colonia argentina barcelonesa de aficionados de Newell´s Old Boys, el club al que llevó al campeonato argentino.

Un grupo aún más numeroso de leprosos, apelativo con el que se conoce a los aficionados del equipo de Rosario, se dieron cita a las puertas de las oficinas del club culé: “Dale, campeón; dale, campeón”, gritaban los aficionados que enarbolaban banderas y camisetas del Ñuls.

A pesar de que todavía no toma las riendas del club catalán, el timonel argentino ya pidió a la directiva la contratación de un zaguero central para tener completa a su plantilla, de cara a la campaña 2013-2014.

Ante las diversas lesiones que sufre el veterano Carles Puyol y la poca experiencia de Marc Bartra, Martino sabe que falta un elemento natural que pueda hacer dupla con Gerard Piqué, pues en ocasiones Vilanova se apoyó en el medio de contención argentino Javier Mascherano para conformar su defensa.

Debido a que los objetos del deseo, los brasileños Thiago Silva y Marquinhos no se pudieron contratar, pues el primero quiso seguir en el París Saint Germain y el segundo fue arrebatado por el mismo cuadro francés —proveniente de la Roma— Martino ya dio a conocer sus otras opciones.

El Tata apuesta por sus compatriotas Walter Samuel, del Inter de Milán, quien jugó en el acérrimo rival, Real Madrid, y por su más reciente pupilo, Santiago Vergini, de 24 años de edad, quien milita en el Newell’s.

El día grande para el ex técnico de la selección de Paraguay será hoy, pues a primera hora firmará su contrato como entrenador barcelonista y posteriormente en una rueda de prensa tendrá la ocasión de exponer su libro de estilo futbolístico, ya como nuevo timonel culé.