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Decidido a no dejar pasar ni el aire en el juego de ida de la reclasificación, contra Nueva Zelanda, José de Jesús Corona asegura, en caso de aparecer bajo los tres postes, que la consigna será no permitir goles para sacar ventaja. Hay que dejar en cero a los “kiwis”, dice.

“Sabemos bien que hay que ganar en casa y aprovechar el primer partido, para sacar la mayor ventaja y ese es ahora el objetivo. Miguel [Herrera] sabrá qué es lo mejor para la Selección en este momento y quien no juegue debe respaldar al resto del equipo”, comparte Chuy, consciente del riesgo de no jugar.

A este problema se agrega la ausencia de los denominados “europeos”, pero a decir del portero cruzazulino, ese no será impedimiento para que México alcance el boleto a Brasil 2014: “Estamos los que tenemos que estar. Como jugadores tenemos que respaldar al técnico muriéndonos en la cancha”, aboga el seleccionado tricolor.

Con la intención de cerrar fuerte la preparación en el escenario donde va a ser el primer choque de la eliminatoria, el próximo 13 de noviembre, el equipo nacional, bajo el mando de Miguel Herrera, practicó ayer en el Estadio Azteca. Curiosamente trabajaron a la misma hora en que se disputará el partido contra Nueva Zelanda.

La idea es adaptarse cuanto antes para sacar el mayor provecho ante el conjunto visitante.

“Ha habido una rápida adaptación a este sistema, porque lo hemos practicado. Y es que nosotros conocemos a Miguel de antes y no debemos tener problema en ese aspecto”, comparte convencido.

A la par del trabajo táctico, que dice comprender, Corona insiste también en ponderar el trabajo de integración que ha realizado El Piojo junto con su cuerpo técnico, con el objetivo de generar unión entre los 23 convocados para cerrar filas y alcanzar el prometido boleto al Mundial. “Nosotros tenemos bien clarito lo que queremos”, descubre Chuy, convertido.