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GUADALAJARA.— Es evidente el cambio de actitud. Desde semanas atrás, cuando Jorge Vergara citó a los medios de comunicación para reconocer públicamente sus equivocaciones a lo largo de 11 años y prometer una mejoría para corregir el rumbo, quedó claro que su actitud es otra. El dueño de Chivas dijo que se involucraría nuevamente con el equipo. Y lo está cumpliendo.

La mañana de este viernes, el empresario apareció nuevamente en Verde Valle, algo que se ha vuelto habitual en el último mes. Luego de más de un año en el que rara vez se le veía en el entrenamiento del Rebaño Sagrado.

Sentado a un costado del campo, observó detenidamente la práctica. A su lado, el presidente deportivo del Guadalajara, el holandés Dennis Te Kloese, conversó con el dueño del club. La crisis del conjunto tapatío amerita la participación de todos.

Vergara estuvo un tiempo viviendo en Estados Unidos, junto a su esposa Angélica Fuentes. Fue una etapa en la que delegó por completo la responsabilidad del equipo. Primero, confió en el proyecto de Johan Cruyff, Todd Beane y Marcelo Michel Leaño. Hoy, todos ellos están fuera de la institución, al igual que el técnico que contrataron, John Van’t Schip.

Después, entregó el mando a otro holandés, Dennis Te Kloese, quien tampoco ha ofrecido buenos resultados en casi dos torneos que lleva al frente. Su primera decisión fue contratar a Benjamín Galindo, dos días antes del debut en el Clausura 2013, frente a Toluca. Para el actual Apertura 2013, El Maestro ya ha sido despedido por su poca productividad y también se cuestiona ya la presencia del europeo.

Por ello, ante el inminente desastre de estar cada vez más cerca del descenso, Jorge Vergara entró una vez más al quite.