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GUADALAJARA.— Hay, según el reporte oficial, 22 mil 500 personas en la tribuna. La mayoría viste de azul. La Máquina ha llegado al estadio Jalisco para hacerlo suyo. Los jugadores levantan las manos para agradecer. Han jugado ante su gente y se han llevado el resultado que buscaban. Cruz Azul derrota al Atlas por 2-1.

La Máquina arranca el encuentro con todo en contra. El césped le juega una mala pasada al portero cementero. Alfonso González se encuentra la pelota afuera del área. Saca un disparo que lleva fuerza, pero no demasiada colocación. Corona se lanza en busca de la redonda, que da un bote caprichoso que cambia por completo la trayectoria del esférico. Se mecen las redes. Atlas toma ventaja.

En la tribuna del estadio Jalisco hay mayoría azul. Los Cementeros impulsan a los suyos. Pero Cruz Azul, aunque ejerce dominio en cuanto a la posesión, carece de claridad mental. Durante un gran lapso de la primera parte tiene el esférico, pero sin generar verdadero peligro. Le falta explosividad al conjunto de Guillermo Vázquez.

Cuando un equipo cae en ese improductivo estatus de posesión sin peligro, son los chispazos individuales los que corrigen el camino. En la última jugada de la parte inicial, Mariano Pavone controla dentro del área. Facundo Erpen lo marca con poco acierto. El delantero visitante se da la media vuelta. Y define ante la salida del portero chileno. Por abajo. Al fondo de las redes. El 1-1, al 44’, justo antes del silbatazo que mando a los equipos al descanso.

En la parte complementaria, Memo Vázquez recurre a una de las armas que ha dejado guardadas en el banco: el camerunés Achille Emaná y le da resultado. Emaná se quita contrincantes en el medio campo. Toca el esférico con precisión para Joao Rojas. El ecuatoriano define con un zurdazo que cumple con la promesa de cruzar la línea. Gol del Cruz Azul. La Máquina le da vuelta al marcador, al 47’.

El partido, entonces, se define a sí mismo: Atlas, único equipo sin victorias en lo que va del torneo, tiene la obligación de ir al frente en busca de la igualada, mientras que Cruz Azul aguarda un contragolpe. Casi una calca del segundo gol: Emaná proyecta nuevamente a Rojas, ero esta vez el ecuatoriano estrella su zurdazo en el arquero Miguel Pinto. Una vez más, Achille causa estragos en la defensa local. Queda solo con el balón dentro del área, pero el derechazo, para desgracia suya se va por encima.

Cruz Azul aguanta los embates y levanta las manos tras el silbatazo final. Con la victoria en el Jalisco, los Cementeros llegan a 23 puntos y se declaran listos para el Clásico Joven frente al América. Atlas suma ya 13 partidos sin ganar.