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LAS VEGAS.— “¡Nací para estar listo!”..., lanza hasta en inglés un decidido Saúl Canelo Álvarez (42-0-1, 30KO) antes de irse a descansar, a unas horas previas de lo que es el combate más importante en su trayectoria. Enfrentar a Floyd Mayweather Jr. (44-0, 26KO). El considerado el mejor de la actualidad. El que nunca ha sido doblegado. El rey del negocio boxístico.

La batalla se sostiene en todos los frentes. Ahí en de las gradas, ayer se dio una guerrilla sin cuartel en la ceremonia de pesaje. Miles de mexicanos invadieron el Grand Garden Arena para apoyar a su “gallo”. Llegaron tempranamente, lo que obligó una apertura del inmueble justo una hora antes de lo programado. Se dejaron sentir en el complejo que es considerado “la casa del campeón” estadounidense.

“Me siento muy contento y orgulloso de representar a mi país en esta pelea, de ser mexicano. Estoy muy agradecido con todos ellos. Como siempre lo he dicho, con la victoria les pagaré tanto apoyo, primero Dios”, comenta El Canelo después de marcar las 152 libras, que era el peso pactado para esta batalla.

Apenas dio sus primeros pasos en la arena y los 12 mil 200 aficionados que se dieron cita abuchearon a Mayweather con fuerza. Lo hicieron sentir visitante, pese a que lleva cerca de 10 años de radicar en Las Vegas. Ante ese escenario, realizó su propia guerrilla sicológica, muy a su estilo.

Una vez que registró 150 libras, dos debajo del límite acordado, Floyd miró con despreció a Saúl. Le masticó un chicle en el cara a cara. Por un momento hizo que el párpado del tapatío brincara involuntariamente. Pero al final fue el mexicano el que se rehusó sostenerle el otro lado del cinturón diamante del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) en las fotografías, para el enfado del señalado como el mejor libra por libra.

“Ya saben cómo son estos niños. Yo estoy tranquilo y les aseguro que este sábado voy a mantener mi invicto. No será nada diferente para mí. Quiero agradecer a todos los aficionados que vinieron apoyarme, así como a los aficionados del Canelo”, lanzó Mayweather.

En el terreno boxístico, Saúl buscará no ser el intento fallido 45 por quitarle el invicto a Money. De lograr su objetivo, destronaría al rey del boxeo actual que sólo por pisar el ring esta noche recibirá cerca de los 100 millones de dólares por bolsa garantizada y Pago Por Evento vendido. Además, sería el primer mexicano que lograra el título diamante del CMB, hecho de oro por primera ocasión. Y no se puede olvidar que El Canelo defiende el invicto también.

“Yo no vengo a dar una buena batalla. Yo vengo a ganar. A comenzar una nueva era en el boxeo. Todo mundo tiene su tiempo, el de Floyd Mayweather ya terminó y es momento de que inicie el mío”, lanza el mexicano, que quiere que hoy sea la noche de su consagración.