futbol@eluniversal.com.mx  

GUADALAJARA.— El ex ariete de la selección de Hungría y ex técnico de varios equipos mexicanos de 1957 a 1983, Arpad Fekete, murió ayer a los 90 años.

Además de ser campeón con las Chivas Rayadas del Guadalajara —el equipo más popular de México—, el desaparecido Oro y Pumas de la UNAM, Arpad Fekete también dirigió a Nacional, Toluca, Atlas, Laguna, Jalisco, Tigres de la UANL, Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), Atlante, Universidad de Guadalajara (U de G), León y Morelia.

Como jugador, debutó como atacante en 1935 con el Ujpest de Budapest y tras ser campeón en 1939 jugó para selección de su país. Emigró en 1945 a Rumania y luego militó en el futbol italiano y francés. Se retiró como jugador en 1954 con el Olimpia de Montpellier.

Como entrenador dirigió a las Chivas Rayadas a partir de la temporada 1957 y lo condujo a la conquista del segundo título en la campaña 1958-59, el de Campeón de Campeones (1959), de Liga (1959-60) y Campeón de Campeones (1960).

Con el Oro conquistó el trofeo de Liga (1962-63) y fue Campeón de Campeones (1963). Además, obtuvo la Copa México con los Pumas de la UNAM (1974-1975).

En 1963, Arpad Fekete llegó nada menos que al banquillo de la Selección Mexicana que participó en la Copa Concacaf, como un reconocimiento a su trayectoria en el balompié nacional.

En la temporada 1989-90 dirigió de nueva cuenta al Guadalajara después de la salida del argentino Ricardo Antonio La Volpe y de Jesús Bracamontes, aunque luego fue reemplazado por el argentino Miguel Ángel El Zurdo Lopez. Dejó de entrenar en 1983.

Arpad Fekete vivió los últimos años de su vida en la ciudad de Guadalajara, en la que murió este domingo. El director técnico era conocido en el futbol como El Bombero.