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Más pruebas de la similitud entre el teocinte y el maíz

El Universal
Lunes 11 de octubre de 2010
Ms pruebas de la similitud entre el teocinte y el maz

LINAJE. Es pariente silvestre del maíz. (Foto: CORTESÍA ALEŠ KLADNIK )

El trabajo multinacional, financiado por varios países y encabezado por Marina Dermastia, del Instituto Nacional de Biología en Eslovenia, echa por tierra varias hipótesis al respecto, ya que ciertas características observadas en el desarrollo celular de los granos de maíz (y que antes se atribuían al proceso de domesticación) fueron observadas también durante el crecimiento de cultivos controlados de teocinte

Numerosas investigaciones han demostrado que el ser humano obtuvo el maíz en la antigua región de Mesoamérica mediante un proceso de domesticación a partir de una planta silvestre emparentada con éste: el teocinte. Por eso, no sorprende que ambas especies compartan muchos rasgos importantes. Sin embargo, la magnitud de estas semejanzas es mucho mayor de lo que se creía e incluye partes de la estructura interna de las plantas, de acuerdo con un original estudio publicado en American Journal of Botany.

El trabajo multinacional, financiado por varios países y encabezado por Marina Dermastia, del Instituto Nacional de Biología en Eslovenia, echa por tierra varias hipótesis al respecto, ya que ciertas características observadas en el desarrollo celular de los granos de maíz (y que antes se atribuían al proceso de domesticación) fueron observadas también durante el crecimiento de cultivos controlados de teocinte.

“Aunque los granos de teocinte (Zea mays, subespecie parviglumis) son morfológicamente diferentes de los del maíz (Zea mays, subespecie mays), su interior no lo es. Estas similitudes son realmente fascinantes”. Tal fue uno de los comentarios de Dermastia, quien concluyó el estudio con apoyo de la Agencia de Investigación Científica de Eslovenia, la Universidad de Florida y el Departamento de Agricultura (ambos con sede en EU).

El equipo académico también documentó en el teocinte otros rasgos que antes se pensaba eran exclusivos del maíz: una muerte celular prematura programada, así como compuestos fenólicos y flavonoides en las paredes celulares. Estas características fortalecen a las propias células vegetales, las protegen contra los agentes patógenos y la decadencia e incrementan también su conductividad de agua.

Otros rasgos peculiares del crecimiento del teocinte incluyen la presencia de una enzima que controla el flujo de azúcar en las semillas en desarrollo, la cual parece formar parte de un mecanismo común de captación de esa sustancia tanto en el cultivo actual como en su ancestro. Estos hallazgos podrían ayudar a mejorar las especies de cultivo comercial e incrementar su rendimiento. “La historia evolutiva del maíz es de gran interés general, debido a su importancia económica y científica”, argumentaron los autores en el resumen de su artículo académico.

En lo que hoy es México, el maíz se cultiva desde la época precolombina. Hoy se producen más de 18 millones de toneladas, sobre todo de la variedad blanca destinada al consumo humano. (Con información de AAAS)

 



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