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El escritor José Emilio Pacheco se despertó ayer por la mañana con una llamada inesperada que le causó una gran alegría y sorpresa: la del rector de la Universidad de Salamanca, José Ramón Alonso, que le anunciaba que acababa de ser galardonado con el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana. Un premio dotado con 42 mil euros, que reconoce el conjunto de la obra de un autor vivo que por su valor literario constituye una aportación relevante al patrimonio cultural común de Iberoamérica y España.

El autor de Islas de la deriva, que había llegado a la final con el nicaragüense Ernesto Cardenal, la uruguaya Cristina Petri Rossi y el español Francisco Brines, se mostraba muy feliz y orgulloso de haber obtenido tan prestigioso galardón, y aseguró que se debía a la suerte y a la generosidad del jurado.

Además destacaba el alivio de haberlo recibido “en medio de los atroces momentos que los mexicanos estamos viviendo” y en los que la ciudad de México ha vivido una situación “de película más parecida al Apocalipsis con todos los restaurantes, cines y comercios cerrados”.

Es “una gran sorpresa”, manifestó el autor en declaraciones a Radio Nacional de España.

“Es muy emocionante y una gran sorpresa. Yo pensé que nunca lo iba a tener. Y me satisfacen dos cosas también: una que sea la primera vez que lo obtiene un mexicano, y que llegue en este momento tan absolutamente siniestro y terrible para los mexicanos”, dijo también a la Cadena SER.

Y mientras se entusiasma por ser el ganador, le preocupa pensar qué dirá, cómo se va a parar y qué ropa se va a poner el día de su premiación.

“Lo malo es que nunca me he puesto un frac, y ni creo que me quede bien”, comentó el escritor con su característico buen talante y excelente disposición a la charla, durante una entrevista con la agencia mexicana Notimex.

“Es un premio que yo no veía venir. Ya había sido yo finalista, pero como sabemos, es común que quien llega a una final pierde toda esperanza de obtener el primer lugar posteriormente. Eso pasa con premios importantes, como el Nobel y cuando se trata de la presidencia del país, particularmente en México”, añadió el autor, quien el 30 de junio cumplirá 70 años de edad.

El jurado estuvo compuesto por el presidente de Patrimonio Nacional, Yago Pico de Coaña; el rector de la Universidad de Salamanca, José Ramón Alonso; el director de la Real Academia Española (RAE), Víctor García de la Concha; y los escritores Pablo García Baena, José Saramago, Luis Antonio de Villena, Jaime Siles, José Manuel Caballero Bonald, José Miguel Santiago Castelo y Carmen Posadas.

El poeta Luis Antonio de Villena le describió como un poeta “moderno y fiel a la tradición clásica, vitalísimo y creativamente cáotico” y destacó que en sus obras aúna “realismo, ironía, crítica social y amor”. “En su poesía Pacheco también ha dedicado versos a un futuro apocalíptico donde criaturas surgidas de la imaginación y el horror tomaran la realidad, la historia o la civilización”, dijo. Del lenguaje de Pacheco, el poeta dijo que parece “coloquial pero está profundamente elaborado” y destacó su tono “satírico” en muchos de sus poemas. Su poesía que hace vibrar tanto el corazón como el entendimiento”, señaló.

Por su parte, Jaime Siles, quien describió a Pacheco como un poeta "significativo" e "importante", declaró que su obra tiene un "carácter singular" porque ha sido el único poeta posterior a Octavio Paz que ha creado un universo auténticamente propio, trabajando prácticamente todos los tonos del lenguaje, el poema confidencial, el irónico, el de lo cotidiano". Dijo que ha trabajado el lenguaje sobre sus tonos, aunando lírica e ironía y alcanzando una gran “complicidad” con el lector. “El premio otorgado en esta edición no descubre a ningún poeta sino que ratifica su amplia y sólida trayectoria”, aseguró Siles.

El escritor planea publicar este año dos libros más, el primero de ellos será de poemas en prosa y llevará por título La edad de las tinieblas. El segundo titulado Como la lluvia estará compuesto por cinco libros de poemas con todo tipo de versos, haikus, epigramas, poemas rimados y sin rima. Pacheco espera tener ambos listos cuando viaje a España el próximo mes de noviembre, para recibir el premio de manos de la reina Sofía. (Con información de agencias)