Nace el danzón
El danzón a diferencia de otros géneros populares, tiene una fecha de nacimiento oficial: el primero de enero de 1879, fecha en la que Miguel Faílde presentó en la ciudad de Matanzas en Cuba su primer danzón, Las alturas de Simpson. Obviamente, ese primer danzón no pudo nacer de la nada. Su árbol genealógico nos lleva hasta Inglaterra donde encontramos a la danza del campo que en el siglo XVII pasó a Francia, adquiriendo gran popularidad aunque con una ligera variación en el nombre: de danza del campo pasó a contradanza. La contre dance llegó a Haití, en ese entonces colonia francesa, de donde fue importada a Cuba por habitantes que huían de las sangrientas batallas que culminaron con la independencia. El ritmo y la manera de bailar pronto se aclimataron en tierras cubanas para convertirse primero en la danza y posteriormente en el danzón, género interpretado originalmente por una agrupación llamada charranga francesa que se compone básicamente de violines, percusiones y flauta. Desgraciadamente en Cuba, después de una época de auge, el danzón entró en franca decadencia, a pesar del surgimiento de algunas variantes exitosas como el danzonete y el chachachá. Para sobrevivir como género popular, el danzón tuvo que emigrar a un país vecino del mar Caribe: México. Es en México donde el danzón, originalmente nacido en Cuba, se sigue cultivando y bailando. El arribo del danzón a tierras mexicanas se dio a través de la península de Yucatán donde la proximidad geográfica facilitó el intercambio de partituras y ejecutantes, lo cual ayudó a que los músicos de la península lo adoptaran como propio para componer desde finales del siglo pasado un buen número de danzones originales. Orquestas como la famosísima de los Hermanos Concha, que después amenizara las noches del Salón México, se formaron en estos años de intenso intercambio entre la península y la isla de Cuba. Posteriormente el danzón llegó a Veracruz, en donde a diferencia de Yucatán, todavía es un elemento vivo y activo de la vida cultural del pueblo jarocho. Tan pronto las partituras llegaron al puerto de Veracruz a través de los barcos mercantes, empezaron a formarse danzoneras que ejecutaban el danzón con un muy peculiar estilo veracruzano. Entre las danzoneras que empezaron a destacar podemos nombrar a las de Camerino Vázquez y Luis Cardona Rojas, quienes instauraron la costumbre de tocar danzón en el zócalo dos veces por semana, costumbre, que se volvió tradición y se conserva hasta nuestros días. De Veracruz, el danzón emigró a la ciudad de México donde ha evolucionado a lo largo de los años, manteniéndose vigente y en el gusto popular, alimentando la historia cultural de México con espacios como el Salón México, Salón Colonia, Los Ángeles o el California. Ya sea en la ciudad de México o en el puerto de Veracruz, el danzón es un elemento vigente de nuestra música popular, que se mantiene vivo como género bailable, quizás por su innegable elemento erótico, sutil y refinado, en una época en que el baile de pareja parece estar desapareciendo. He aquí a uno de los bailes de salón más mitificado por los asiduos a los salones de baile. El danzón es un baile cubano que utiliza el ritmo del cinquillo. Por lo general las parejas bailan muy pegaditas y sacrifican la velocidad por el estilo. El movimiento debe ser muy sutil y sin un gran desplazamiento en la pista. Los exagerados dicen que una buena pareja de danzón debe ser capaz de bailar en el área equivalente a una moneda de centavo. El icono de la música danzonera lo constituye la canción llamada Nereidas del compositor Amador Pérez Torres quien nació en Zaráchila, Oaxaca, el 15 de abril de 1902. El baile del danzón consiste básicamente en bailar dibujando un cuadro o dos cuadros seguidos con los pies en el piso. La pareja gira y se hace girar a la mujer, manteniendo el mismo ritmo. Cuando la orquesta hace una pausa en la música, se le aplaude mientras las mujeres se echan aire con el abanico. En ciertas canciones, el ritmo se acelera al final y se baila más rápido, eso sí, sin perder el estilo, y a ritmo del son cubano.





