Es un canal encerrado en otro canal, un espacio en donde todo está diseñado para los niños: los comerciales, los cortes, los promocionales, la programación, los puntos de contacto.

Once Niños es un concepto innovador en la televisión mexicana. Y tan efectivo que en 2002, durante el Segundo Encuentro del Canal Once con sus Televidentes, convocó a 2 mil 606 pequeños, que calificaron con 8.5 la programación. 89 por ciento coincidió en que les aporta valores y 87 por ciento en que les da conocimientos.

Al año siguiente, 40 por ciento de las 12 mil 836 participaciones del encuentro fueron emitidas por niños entre cuatro y 12 años para quienes sus programas favoritos fueron Zoboomafoo, El diván de Valentina, Bizbirije, Cuentos de la Calle Broca y Mona la Vampira .

La programación infantil en el Once tiene sus antecedentes en la década de los 70, con programas como Pensando y viajando con los niños, Los cuentos de María Luisa y El trompo y el lápiz .

En las décadas siguientes, los programas infantiles fueron una constante en los horarios vespertinos de la emisora, y en los matutinos los fines de semana.

En 1992, la directora Alejandra Lajous le pidió a Patricia Arriaga, quien había trabajado en Plaza Sésamo, que diseñara una propuesta dedicada a los infantes. Así nació Zona O y Bisbirije .

Arriaga salió del canal y regresó en la administración de Julio Di Bella. En octubre de 2001 nace Once Niños, que vino a constituirse como un canal dentro del canal.

"Proyecté Once Niños a la emisora como un espacio cerrado cuenta Arriaga. Fuimos aprendiendo que el espacio para niños debería ser completamente cerrado, con información relevante para ellos.

"A los niños les encanta. Reconocen cuando se preocupan por ellos. Once Niños está espléndidamente posicionado no sólo en la mente de los niños sino también de los padres. El concepto se asocia con televisión de calidad."

El espacio es interactivo, de hecho cuenta con una página web aparte.

"Una de las cosas que establecí como política de Once Niños fue evitar enviar saludos. Si los niños no tienen nada qué decir no tienen por qué decirlo en televisión. Los niños entendieron muy rápido que si querían hablar tenían que ser opiniones, y para comentar tenían que estar informados. Los niños han crecido mucho con Once Niños."

La ex directora de Once Niños concluye que en México "el concepto es una innovación no tanto por la programación como por la constancia y la seriedad con que se trabaja con los niños, y además por el carácter horizontal de la comunicación que se establece con ellos. Una perspectiva sin el deber ser que los alumnos les ponemos constantemente."