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NUEVA YORK _ Una pintura de Pablo Picasso impuso la noche de ayer un récord mundial para una obra de arte en una subasta. Mientras que una obra de Alberto Giacometti pasó a ser la escultrua más cara en una subasta.

Las mujeres de Argel (Versión O) se vendió por 179 millones de dólares en la casa de subastas Christie’s de Nueva York. La venta partió de 100 millones hasta llegar a los 160; el precio de 179 millones de dólares incluye las comisiones del vendedor.

La pintura de Picasso es una obra multicolor que presenta una mujer con poca ropa entre desnudos más pequeños. El anterior récord de venta para una obra, dentro de una subasta pertenecía a Tres estudios de Lucian Freud, de Francis Bacon, que se vendió por 142,4 millones de dólares en 2013.

Las mujeres de Argel, es la número 15 y final, de las versiones que de esta obra pintó Picasso. La pintura es la mejor concluida de esa serie que data de finales de 1954 y comienzos de 1955; en ella, hizo un homenaje al maestro francés del siglo XIX, Eugene de la Croix. En los documentos de su Antología fue citado un diálogo imaginario donde el pintor decía: “Tenías a Rubens en mente y pintaste un De la Croix”.

Los especialistas consideran que después de Las señoritas de Avignon, de 1907, y Guernica, de 1937, es la obra más importante del pintor español en manos privadas.

La obra es parte de un proyecto que el pintor inició tras la muerte de su amigo y rival Henri Matisse, y se considera una elegía a él. Picasso creó casi 100 estudios en papel y 14 pinturas de la pieza que destaca por su composición, los juegos con el cubismo y la perspectiva, los colores vivos y las obsesiones del artista ahí presentes.

La escultura más cara. El segundo gran récord de la noche fue para la escultura L´homme au doigt (El hombre que apunta), de Alberto Giacometti (1901-1966), que alcanzó un precio de 141.2 millones de dólares, incluida la comisión. Esta escultura en bronce se convirtió así en la más cara que se ha vendido en una subasta.

L´homme au doigt, realizada en bronce por el escultor suizo en 1947 y de 177,5 centímetros de altura, es una representación escultórica de la filosofía del existencialismo y forma parte de una serie de seis piezas, de las cuales es la única pintada a mano por el artista.

L´homme au doigt confirma así el monopolio de Giacometti en el mercado millonario de la escultura, pues supera su propio récord, L´Homme qui marche (El hombre que camina) , que alcanzó en 2010 los 104,3 millones de dólares en Londres.

Alberto Giacometti, está considerado por algunos como el escultor más destacado del siglo XX. ¿Por qué causan fascinación las figuras alargadas del escultor suizo? Los expertos creen que hay muchos motivos, pero que la mayoría están relacionados con nuestros sentimientos a la hora de observarlas. Con sus delgados brazos y piernas y sus rostros apenas reconocibles, ponen al ser humano en una nueva relación con el espacio: el observador se siente identificado porque, como todos los demás, se mueve en el inmenso mundo sin saber hacia adónde.

La admiración por Giacometti, nacido en 1901 en Borgonovo, Suiza, y muerto en 1966 en Coira, va sin embargo más allá de las subastas: habitualmente se muestran exposiciones de sus obras en muchas partes del mundo. Y en el billete de 100 francos suizos aparece su foto y en el reverso una de sus figuras, El hombre que camina, protagonista también de una de las subastas más caras de la historia en 2010.

Entre el grupo de 35 obras que la noche de ayer iban a subastarse, otras piezas que alcanzaron grandes precios fueron una pintura de Peter Doig Swamped que llegó a 23 millones de dólares (sin incluir comisión); un Mark Rothko No. 36 por 36 millones, así como otra pintura de Pablo Picasso, Buste de femme, que se vendió por 60 millones de dólares (no se incluye tampoco en esta cifra la prima final). Con información de agencias