Destacan en FIL Minería legado de Gabriel Vargas
VARGAS. En su creación "La Familia Burrón" figuran alrededor de 70 personajes, quienes retratan fielmente a la sociedad mexicana, capitalina concretamente. (Foto: Archivo )
El legado cultural del historietista mexicano Gabriel Vargas (Tulancingo, Hidalgo, 5 de febrero de 1915-Ciudad de México, 25 de mayo de 2010) se ha mantenido vigente gracias a la limpieza de su obra, a la legítima permanencia de sus personajes y a la bien definida línea literaria que supo imprimir en cada trabajo realizado.
Así lo aseguró el narrador, crítico literario, cronista y antólogo Ignacio Trejo Fuentes (Pachuca, Hidalgo, 1955) al ofrecer la amena charla "Vida y obra de Gabriel Vargas", como parte de las actividades de la XXXVI Feria Internacional del Libro en el Palacio de Minería (FILPM) que se lleva a cabo en ese recinto hasta el 2 de marzo entrante.
"El nombre de Gabriel Vargas, tal vez, no nos diga nada, pero al escuchar ‘La Familia Burrón' algo nos viene a la cabeza", dijo Trejo Fuentes, para añadir que "a diferencia de muchos escritores como yo, él inició su carrera con radionovelas e historietas; de niños nos dejaban de tarea leer ‘La Odisea', pero la cambiábamos por sus lindas historietas".
Recordó que, huérfano de padre, cuando tenía cuatro años de edad, Gabriel llegó a la capital del país donde comenzó a dar muestras de su habilidad para dibujar.
En 1930 ganó el segundo lugar en un concurso internacional de dibujo, que se llevó a cabo en Osaka, Japón, y a partir de ahí contó con el apoyo de maestros y funcionarios del gobierno, añadió Trejo.
La croniquilla dice Alfonso Pruneda, entonces director de Cultura del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), le ofreció una beca para estudiar dibujo en París, sin embargo, Gabriel Vargas la rechazó porque prefirió tomar el puesto de ilustrador que ya le habían conseguido en el diario "Excélsior". A los 17 años, fue jefe del Departamento de Dibujo.
Los funcionarios de la Secretaría de Educación Pública, incluido José Vasconcelos, le ofrecían esa beca para ir a Francia a estudiar, lo que rechazó para quedarse en esta ciudad. Comenzó su carrera con "Retrato de un desfile en el centro de la ciudad" y después, en el periódico "Novedades" hizo viñetas, contextos y publicaciones.
Antes de "La Familia Burrón", publicó "La vida de Jesús" pero fue censurada, ya que en esos tiempos se estaba gestando la guerra cristera.
Poco después surgieron algunas historias como "Birola y Polita", cuyo argumento y dibujos eran totalmente de su autoría, así como "Frank piernas cortas".
El cronista subrayó que a pesar de que tenía poco tiempo de radicar en la capital del país, los textos de Gabriel Vargas "tenían un sabor urbano" y el mayor éxito antes de los "Burrón", fue su historieta "Los Superlocos", un retrato de los caciques del México de esos años idos.
En "La Familia Burrón" figuran alrededor de 70 personajes, quienes retratan fielmente a la sociedad mexicana, capitalina concretamente.
"A pesar de ser conservador, Vargas dio a la mujer un espacio en donde tenía peso, es por ello que ‘Borola' representa al pueblo mexicano que ya no soporta las irregularidades", refirió el crítico.
La crisis económica es un fantasma recurrente en la vida de los "Burrón", tanto, que la historia de la familia puede leerse como novela de la última década, y los personajes poseen algunos objetos que no utilizaban las mayorías de la época, a pesar de la precaria situación de la familia, como radios y la televisión, que en su tiempo eran innovaciones.
El concepto de amistad siempre fue central y recurrente, lo mismo que la crisis económica. Desde el punto de vista artístico, a más 60 años de su creación, "La Familia Burrón" no se pierde, es una obra que se muestra entera, con todo y sus circunstancias.
rqm