El presidente de Uruguay fue condecorado por la Universidad de Guadalajara; el acto fue marcado por protestas en favor de los normalistas de Ayotzinapa

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El conteo del 1 al 43 coronado con el grito de justicia y la consigna de "Vivos se los llevaron, vivos los queremos" fuera del auditorio Salvador Allende del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad de Guadalajara marcó la llegada de José Mujica, presidente de Uruguay, a esta institución educativa, a donde acudió para recibir la presea Corazón de León.

Mujica fue recibido entre aplausos y gritos de la comunidad estudiantil ahí reunida. Y después de los discursos de Tonathiu Bravo Padilla, rector de la UDG, y José Alberto Galarza Villaseñor, líder de la Federación de Estudiantes, se dirigió a los jóvenes y los exhortó a que no se dejen llevar por el odio el corazón porque esto termina destruyendo. "Yo sé que pasan por un momento difícil, pero no se puede luchar por algo que no se quiere, quieran a su país, siéntalo. Comprométanse", dijo.

En su discurso, que fue interrumpido en varias ocasiones por los aplausos del público, el mandatario uruguayo también señaló que la política no es una profesión, sino una devoción. "No se debe de estar en la política por la plata, no necesito más de lo que necesita mi pueblo para vivir", declaró.

También habló que resulta necesario que los gobiernos bajen los sueldos de los funcionarios públicos. "Debe haber política tributaria, que pague más quien más tenga, y dignidad laboral para los trabajadores", dijo.

Mujica culminó su discurso con elogios a México y destacó el asilo que el país otorgó México a miles de refugiados uruguayos.

Más tarde, en una breve conferencia de prensa Mujica fue cuestionado sobre su declaración respecto a que México es un estado fallido por la violencia y los roces diplomáticos que esto causó. "En ningún momento me sentí afectado. Yo digo lo que pienso", respondió.

Y añadió que México es un país que tiene problemas y dificultades muy parecidos a los que tiene el resto de América Latina con la diferencia que nuestro país está cerca de Estados Unidos.

"No es culpa solo de México, es un problema que tenemos en toda América Latina y es un problema que no hemos podido superar. A golpes estamos aprendiendo", dijo.

El mandatario uruguayo acudirá mañana a la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, donde sostendrá un diálogo con el periodista Ricardo Rocha, a las 9:30 de la mañana, en el auditorio Juan Rulfo.

Rechaza materse en asuntos de México

Mujica no quiso hoy hablar sobre la situación que vive México por la desaparición de los 43 estudiantes, después de que hace unos días se desatara un conflicto diplomático tras unas declaraciones en las que llamaba al país "estado fallido".

"Es una tradición del pueblo mexicano porque yo tuve compatriotas que vivieron años acá (...) y México les decía te amparamos, tienes casa, tienes comida, tienes oportunidad de trabajo, pero no vengas de afuera a meterte en nuestras cosas" , dijo el presidente en un encuentro con medios de comunicación.

El mandatario, quien entregará el poder el 1 de marzo al electo Tabaré Vázquez, respondió así a una pregunta sobre su opinión acerca de la situación que atraviesa México por la desaparición de 43 estudiantes en Iguala el pasado 26 de septiembre, a manos de policías corruptos que los entregaron al narco.

"Yo, jefe de Estado, no debo de darle manija (molestar, insistir) a las contradicciones y al dolor del pueblo mexicano porque nada contribuiría a solucionar el problema de fondo y lo único que haría sería multiplicar el dolor de las contradicciones que tienen hoy" , dijo el presidente.

A México, agregó, "solo le digo que le doy mi abrazo y mi solidaridad" , tanto "a su pueblo" , como "a su Gobierno" , insistió.

Hace unos días, Mujica decía en la publicación "Foreign Affairs Latinoamérica" que "a uno le da una sensación, visto a la distancia, de que se trata de una especie de Estado fallido, que los poderes públicos están perdidos totalmente de control, están carcomidos" .

El Gobierno mexicano, encabezado por Enrique Peña Nieto, anunciaba poco después su "rechazo categórico" a estas declaraciones y el uruguayo debió retractarse a través de un comunicado en el que mostró su solidaridad "con México, su sistema político y su gobierno" .

ml