Es deber nacional proteger patrimonio judío: Marruecos
El ministro de Cultura de Marruecos, Mohamed Amine Sbihi, ha manifestado que la protección del patrimonio judeo-marroquí es "un deber nacional" por lo que "es necesario sensibilizar sobre este asunto a las futuras generaciones".
"El patrimonio judeo-marroquí, testigo de una historia común que data de hace varios siglos, transmitirá a las futuras generaciones una importante herencia: la cohabitación", destacó el ministro en Ifrane, centro de país, en el marco del lanzamiento de una caravana para la protección de este patrimonio.
Además, según informó hoy la agencia MAP, Sbihi explicó varias iniciativas destinas a preservar este patrimonio como la próxima restauración de la sinagoga en la ciudad de Essauira, que será financiada por el Gobierno alemán.
La caravana, que partió ayer de Ifrán y visitará las ciudades de Fez y de Casablanca, ha sido una iniciativa conjunta del museo del judaísmo marroquí de Casablanca y la comunidad judía de Fez.
La animosidad de ciertos grupos marroquíes (entre los que se encuentran islamistas e izquierdistas) contra cualquier atisbo de "normalización política" con Israel convierte en altamente sensible cualquier manifestación, aunque sea cultural, que tenga que ver con el legado judío si aparece asociado el nombre de Israel.
La semana pasada un grupo de manifestantes intentó boicotear una exposición hispano-judía organizada por el Instituto Cervantes de Tánger, e incluso llegaron a realizar una campaña de mensajes por internet en contra de su presentación.
En la primera mitad del siglo XX, en Marruecos vivían 400 mil judíos, 28 mil de ellos solo en la ciudad de Fez, que contaba entonces con más de 50 sinagogas.
El éxodo de los judíos de Marruecos se contabilizó por decenas de miles, tras la creación del estado de Israel en 1948 y la independencia del país magrebí en 1956. Las numerosas sinagogas, como las escuelas o los centros sociales hebreos fueron abandonadas.
No obstante, las tumbas de santos judíos diseminadas por todo país atraen en la actualidad cada año a miles de fieles judíos con origen marroquí.
En Marruecos se estima que viven hoy aproximadamente 3 mil judíos, casi todos ellos en Casablanca y unos 50 en Fez.
sc