Reinventar la ciudad a través del dibujo

MURAL EFÍMERO. La obra invade espacios de la galería, más allá del cuadro original; es una pieza en transformación. (Foto: FOTOS LEO MORALES EL UNIVERSAL )
ssierra@eluniversal.com.mx
El peso muerto de los días perdidos es la exposición que Bayrol Jiménez (Oaxaca, 1984) abre el jueves 22 de mayo en la galería Luis Adelando, de esta ciudad.
A la galería, rodeada por una colonia tradicional como lo es la Anáhuac, Jiménez lleva elementos urbanos transformados en obras de arte: es la ciudad que está en la periferia y la ciudad del centro, esa que es considerada de museo.
Jiménez expondrá en dos grandes salas más de 70 dibujos, una “escultura” creada con Rolando Martínez y un mural efímero.
Con estudios en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado, “LaEsmeralda”, y en la Escuela Nacional Superior de Arte “Villa Arson” en Niza, Francia, Jiménez ha dedicado la mayor parte de su obra al dibujo.
“La base de mi trabajo es el dibujo, dibujo en su forma más básica hasta una experimental”.
Su obra invita al público a la interacción, esto es más claro en la colaboración que presenta con Martínez. Crearon una pieza que él llama “gesto escultórico”, con telas inspiradas en elementos de campamentos de protestas y de tianguis. Las mantas, a través de un mecate, están unidas a un bloque de cemento, como los que se ponen en las calles para guardar un lugar. Esos elementos, como los detalles en torno de los monumentos, las estatuas, los neumáticos, las pintas, son tomados por Jiménez y con ellos traza los dibujos que ahora presenta.
“Mi trabajo tiene que ver con la observación de la ciudad y ahí encuentro objetos que me interesa retomar después en dibujos; uno de los objetos que más encuentro son las cubetas de cemento para apartar lugares en las calles. Parto de esos elementos, desde el monumento, hasta lo que es visto como basura, pero que tiene una funcionalidad para muchas personas”, dice el artista.
Jiménez opina que hoy en las urbes el llamado ‘espacio público’, ya no es tan público: “Se nos están imponiendo, por un sistema o por el gobierno o por una urbanización. La gente se va a apropiando a través del grafiti, los tianguis, pero si no, el espacio está decidido por alguien más. Por eso la idea de tratar de apropiarme de ese imaginario del espacio y componerlo de una forma quizás más libre, ni tan clásica ni tan perfecto”.
En esos dibujos hay escenas con mucho humor, y hay diversidad de materiales para dibujar, como acuarela, lápiz, colores, gouache.
Arte en proceso
A los dibujos y a su escultura se suma una obra efímera que en estas dos últimas semanas Bayrol Jiménez ha estado creando. Es un mural que ocupa varios muros de la galería, donde planteó una narrativa como punto de partida -tomando detalles del Guerinica, de Picasso- para ir deformándola, retirando fragmentos, invadiendo los espacios del piso y los que van más allá del cuadro con que inició.
El resultado se conocerá en la apertura de la muestra. “Siempre parto de algo lineal y desde ahí empiezo a descomponer el dibujo. Me interesa la composición de la pintura clásica y moderna. Lo que hago es retirar, mover, volver a meter otros elementos. Y no sé cuál será el resultado”.





