Recuerdan a Gabo en la FIL de Oaxaca
ANUNCIO. Jaime Abello (a la derecha), director general de la FNPI, inauguró el encuentro literario con una conferencia magistral en torno al escritor colombiano. A su izquierda, Guillermo Quijas, director de la editorial Almadía. (Foto: CORTESÍA: EDITORIAL ALMADÍA )
yanet.aguilar@eluniversal.com.mx
Oaxaca.— Muchas cosas quedaron en claro: que “el periodismo fue la forma en que Gabriel García Márquez hizo política públicamente”, que fue “un magistrado de los hechos” en el sentido de que fue alguien que siempre estuvo persiguiendo la verdad; que siempre le preocupó América Latina y la necesidad de que pudiera reconocerse a sí misma y que “Gabo tenía tres oficios: contador de historias, narrador y periodista”.
Jaime Abello Banfi, director general de la Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano, fue el encargado de postular algunas de esas varias verdades con las que navegó en la vida García Márquez, el escritor y periodista fallecido el pasado 17 de abril, y que ayer fue recordado en el conversatorio “Gabo periodista”, realizado en el marco de la 34 Feria Internacional del Libro de Oaxaca, que hoy se inaugura oficialmente con el homenaje al autor de Cien años de soledad y a Álvaro Mutis.
Durante el diálogo sostenido con el escritor mexicano Jorge F. Hernández, Jaime Abello dijo que García Márquez hizo ciudadanía y política a través del periodismo, pero además que fue un hombre que tras la escritura de El otoño del patriarca descubrió el gran poder del periodismo y de las enormes posibilidad de la investigación exhaustiva que utilizó en buena parte de sus libros, incluidos los estrictamente literarios.
Abello, quien forma parte de la delegación colombiana –integrada por más de cien escritores, periodistas y artistas-, como país invitado de honor, celebró la calidad literaria de Gabo, pero ante todo su grandeza como periodista, además de que fue un hombre de acción y un ser que hizo política pública mediante el periodismo.
“Es un periodista, un magistrado de los hechos, alguien en quien se puede tener confianza, que sabes que no te está mintiendo y que realmente está persiguiendo la verdad y no está con una agenda oculta de promover o una candidatura o un producto o una tendencia, esa es la perspectiva de la ética, me parece que Gabo fue un hombre con sus ideas pero radicalmente independiente y radicalmente tributario de la verdad, un hombre comprometido siempre con la libertad de expresión; a mí me da risa cuando oigo tanta gente hablando de su relación personal con Fidel, pero lo que pasa es que apreciaba la amistad y reconoció el valor histórico del papel y la capacidad de Castro de haber desafiado a la gran potencia”, señaló Abello.
También dijo que “Gabito” fue un hombre siempre del lado de la democracia, de la libertad, una persona que aprovechó su relación con el poder para ayudar a mucha gente. “Desde Fidel, Clinton, Salinas, Torrijos, Carlos Andrés son gente con la que tuvo una empatía, que les encontró una manera leal y honrada de relacionarse, un punto más allá de que cada uno de ellos tuviera su agenda política o su estilo”.
2015. Año de duelo y de festejos
La Fundación cumplirá el 18 de marzo de 2015, 20 años desde la inauguración que hizo el propio Gabo con un encuentro sobre libertad de expresión en Cartagena en colaboración con el Comité de Periodistas de Nueva York, los periodistas que hoy son maestros de la Fundación y herederos de García Márquez celebrarán la fecha con un encuentro de periodismo en Cartagena, justo un mes antes de que se cumpla el primer aniversario de la muerte del patriarca.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Jaime Abello Banfi dice que desde 1995 han tenido más de 30 mil periodistas en sus talleres y seminarios, al que se han sumado otros proyectos fundamentales como el festival de periodismo en Medellín, Colombia, que se organiza en el marco de la entrega del Premio Gabriel García Márquez de Periodismo, que en octubre pasado llegó a su segunda edición. “Creemos que los premios de periodismo tienen que cumplir una función de visibilizar y promover, no sólo para estimular a los periodistas, sino para que sirvan de modelos y referente nuevos autores, nuevas maneras de trabajar”.
A esa serie de nuevas actividades se suma la complicidad que ayer mismo fue anunciada por Jaime Abello y Guillermo Quijas-Corzo, director general de la editorial oaxaqueña Almadía, a través de talleres sobre periodismo de autor que este año arrancó con el taller que está ofreciendo Martín Caparrós. Pero ese lazo con México no será el único, podría sumarse la renovación de la colección de periodismo de la Fundación con el Fondo de Cultura Económica y un proyecto de crónica con el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), con quien emprendieron los encuentros de “Nuevos cronistas de Indias”.
Jaime Abello dice que la Fundación para el Nuevo Periodismo Iberoamericano tiene garantizada su permanencia porque García Márquez dejó “una institución que cuenta con la solidez de un sistema de gobernanza, una institución económicamente estable, con una junta directiva internacional presidiada por Mercedes Barcha —viuda del novelista-, con periodistas de distintas partes del mundo y que tiene un plan que ha reconocido los cambios del periodismo y ha adaptado las estrategias de la fundación a esas nuevas realidades, trabajando en toda América Latina desde Cartagena”.
Dijo que Mercedes asumió la presidencia de la junta directiva el 17 de junio en la ciudad de México, tras la muerte de Gabo, y señaló que “la relación con Mercedes es plena” y que sus hijos, Rodrigo y Gonzalo, están metidos en sus propios quehaceres creativos, están demasiado ocupados “pero tenemos toda la relación personal, y si algún día quieren unirse a la junta directiva nos encantaría. Lo importante es responder siempre con calidad a nuestros programas y mantener el prestigio”.
Abello Banfi afirmó que el único peligro que tiene la Fundación “puede ser bajar la guardia pero no nos va a pasar, no lo haremos por ‘Gabo’ ni por el periodismo…, dijo.
Y agregó: “Nosotros somos un legado vivo de Gabriel García Márquez, eso significa que lo tenemos todos los días muy presente porque dependemos de su inspiración, de sus ideas, lo releemos, lo discutimos, pensamos cómo lo hubiera hecho Gabo y tratamos de ser fieles al estilo que él quiso imprimirnos, un estilo alegre, descomplicado, eficaz, serio; es decir, esa combinación entre la cheveridad del Caribe y la seriedad, porque ese amagallismo o sentido del humor es perfectamente compatible con el rigor y con el trabajo y con la perseverancia que nos enseñó”