Presentan libro sobre el quehacer escenógrafico de David Antón

1963. David Antón, junto a Dolores del Río. (Foto: CORTESÍA ESCENOLOGÍA )
ana.pinon@eluniversal.com.mx
En el teatro, dice el historiador e investigador teatral Edgar Ceballos, lo primero que desaparece al concluir una temporada y caer el telón final es la escenografía, por eso en México prácticamente no existen testimonios del trabajo realizado por grandes escenógrafos como Carlos Lazo, entre muchos otros.
“En el teatro mexicano se destruye o se recicla la escenografía, es realmente difícil tener memoria tangible de las creaciones de los escenógrafos”, explica Ceballos en entrevista.
Sin embargo, el escenógrafo y vestuarista David Antón, conocido como “El príncipe del arte escenográfico” por Rafael Solana, pilar del teatro mexicano y autor de más de 600 escenografías, ha resguardado a lo largo de su trayectoria un archivo importante de su trabajo que incluye bocetos, dibujos, fotografías y otros documentos.
Ese tesoro que data de la segunda mitad del siglo XX ha sido reunido en el libro En los andamios del teatro, editado por Escenología dentro de la colección Memoria y Creación.
“En Escenología decidimos que era necesario hacer un rescate de la escenografía en México, por eso dedicamos un libro a la obra de David Antón, quien inició su carrera a principios de los años 50 y desde entonces ha realizado casi un millar de escenografías, algo inaudito en la historia del teatro no sólo en México, sino en el mundo. Él hacía alrededor de 52 escenografías por año, una locura, esa cantidad no la hacía nadie ni se hace ahora, los jóvenes con suerte hacen una o dos al año. El caso de Antón es excepcional”, cuenta Ceballos.
La editorial se acercó al escenógrafo nacido en 1929, quien ha colaborado con dramaturgos y directores fundamentales de nuestra historia dramática como Luis G. Basurto, Emilio Carballido, Salvador Novo, Celestino Gorostiza, José Solé, Manolo Fábregas, Sergio Magaña, Carlos Olmos y Alejandro Jodorowsky, para comenzar a perfilar un libro sobre su obra. Entonces descubrieron que el artista resguardaba hasta 30% de su quehacer escénico. “Es un hombre muy creativo que siente un gran respeto por los directores y los actores, que raya incluso en lo fanático; siempre ha pensado que la escenografía está al servicio de ellos. El teatro mexicano le debe mucho, especialmente la comedia musical, 85% de las obras que se han hecho en México en los últimos 50 años son de su autoría. Gracia a él ese género tuvo un gran auge en nuestro país”, dice.
En el libro, además de los bocetos, se presentan los constructivos que detallan cómo realizar las escenografías. “Es un libro de arte, una maravilla, abre todo un horizonte sobre este quehacer. David ha sido muy generoso al permitir hacer este libro”.
El libro será presentado hoy por Virginia Gutiérrez, José Solé y Luis Gimeno, a las 18:45 horas en la sala Manuel M. Ponce de Bellas Artes.





