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La noticia de Javier Camarena sumándose a la reducida lista de grandes tenores “bisando” en el Metropolitan Opera House de Nueva York, dio la vuelta al mundo.

El mexicano se había convertido en el tercero en 70 años en la historia del MET en provocar que el público exigiera, con su ovación que repitiera el aria, algo que sólo habían conseguido Luciano Pavarotti y Juan Diego Flórez. El pasado lunes, el tenor bautizado por la prensa neoyorkina como el “Príncipe de los tenores” volvió a realizar la hazaña de repetir el aria “Si, ritrovarla io guiro” de La Cenerentola de Rossini, ante una ovación aún mayor que la primera.

“No lo puedo negar, el segundo bis sí me lo esperaba porque la energía y el desempeño que tuve fueron exactamente los mismos, así que esperaba les gustara. La gente respondió con más entusiasmo que en el primero, fue realmente emocionante ese gran favor que me hizo el público, es de las cosas más contundentes que me han pasado en mi carrera”, explicó en entrevista con EL UNIVERSAL.

En 1994, Luciano Pavarotti repitió un aria de Tosca, y el tenor peruano Juan Diego Flórez hizo un bis en 2008 con “Un Mes Aimee” de La hija del regimiento de Donizetti, y en 2012, repitió “Una Furtiva Lágrima” de El elixir de amor, del mismo compositor. “Sé que ya soy el tercero en la historia reciente del teatro, lo que no sé es si alguien más ha bisado en dos funciones seguidas, de cualquier modo lo único que sé es que es fantástico para mí”.

Ante el éxito, Camarena aseguró: “La repercusión de este éxito será muy grande, la misma gente de prensa del teatro me ha dicho que la noticia fue difundida en todo el mundo, más de 8 mil agencias de información la difundieron. La responsabilidad que tengo ahora es mucho mayor, de ahora en adelante se esperará ese desempeño de mí, hasta que me retire”.

Aunque los sucesos son recientes, Camarena ya ha tenido tiempo de observar las grabaciones que existen de los encores. “He trabajado mucho, soy muy autocrítico y no puedo decir que me siento sorprendido. He visto las grabaciones de las arias y lo que escucho es un gran gozo por el canto, más que cualquier otra cosa. Escucho un canto honesto que va de la mano con lo que está sucediendo en escena. Desde luego detecto detallitos, cosas técnicas, pero porque soy muy exigente conmigo mismo, me gusta cuidar los detalles”.

De acuerdo con la prensa neoyoquina, los encores solían ser una práctica común en el siglo XIX, pero hacia la década de 1920 comenzaron a prohibirse, incluso en el MET no se permitía, aunque en los teatros europeos son más usuales. En 2005, el tenor mexicano Rolando Villazón fue noticia cuando repitió “Una Furtiva Lágrima” en Barcelona y Viena.

“Esta producción siginificaba muchas cosas, no se llevaba a escena desde 2007, era la primera vez de Joyce Didonato en el MET con La Cenerentola, y mi sustición por Juan Diego. Había mucha expectativa, pero seré honesto, no creí que la reacción fuera tan fuerte. Antes, en Monterrey y en Cartagena, con este mismo papel, ya había tenido una buena respuesta, pero lo del MET rebasó todos las expectativas”, dice.

Sobre los elogios que ha recibido de la prensa y la crítica especializada, refirió: “Eso del ‘Príncipe de los tenores’, me gusta, está muy bonito, pero no alimenta mi vanidad, por el contrario, tengo que responder a eso, estoy obligado a mejorar. No voy a dormir entre laurales, voy a trabajar con más ímpetu. Soy un intérprete de ópera, no estoy para presumirme, sino para ser parte de un equipo. Si canto en dúo, lo hago, no me interesa competir en quién lo hace mejor, así que mi compromiso con la ópera es lo que tal vez más valoran en mí”.

A futuro

Además de la cálida reacción en el MET, el cantante destacó la positiva recepción que ha tenido su disco titulado Recitales, que incluye tanto arias de ópera como piezas clásicas del repertorio popular mexicano. Además, continua añadiendo compromisos a su ya nutrida agenda.

“Estamos viendo opciones y viendo posibilidades de repertorio, que se están ajustando muy bien a los planes que tengo para mi carrera. Sé que tengo más notoriedad y con eso vienen más ofertas, pero debo analizar muy bien las cosas. Por ejemplo, con la Scala de Milán desde hace tiempo hemos platicado, me ofrecieron algo pero lo rechacé, las otras propuestas no se han concretado porque no coinciden con la agenda que ya tengo. Lo importante es que ellos tienen interés desde mucho antes de lo que ocurriera en el MET”.

El 10 de julio el tenor volverá a México para festejar sus 10 años de carrera con un concierto en su ciudad natal. “En Xalapa festejaré la primera década. La aceptación de la gente, la forma en la que me abraza el público de mi país, me hace sentirme pleno y feliz con este carrera. Un cariño que corresponderé dando lo mejor de mí”.