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La pianista Daniela Liebman, de 11 años, suma un éxito más a su carrera: el 1 de febrero debutará en el Palacio de Bellas Artes, con la Orquesta de Cámara de Bellas Artes (OCBA) dirigida por Anatoly Zatin, su maestro. Además, en mayo volverá a este recinto para ofrecer otro concierto y en octubre dará un recital en el Festival Internacional Cervantino. Invitaciones con las que, dice la solista en entrevista con EL UNIVERSAL, se siente querida por su país.

El programa del primer concierto, a las 12 horas, está conformado por Preludio a Apollo et Hyacinthus y Concierto para piano No.8 de Mozart; Sinfonía No.6 en Re menor de Boccherini.

“Estábamos en Nueva York y recibimos una llamada para avisarnos que querían que tocara en el Palacio de Bellas Artes y dijimos que lo haría con muchísimo gusto. Me emocionó mucho la invitación porque sé que es uno de los lugares más importantes de México y que es conocido por todo el país. Nunca he visto la Sala Principal, pero sí la conozco por fotos, estoy muy contenta”, comenta la pianista.

Daniela tiene ya dos éxitos no igualados por otra pianista mexicana: es la solista más joven en tocar con una orquesta, y la primera en debutar a tan corta edad en uno de los escenarios más prestigiosos del mundo, el Carnegie Hall de la ciudad de Nueva York.

El 27 de octubre Liemman, quien es originaria de Guadalajara, junto con la Park Avenue Orchestra, interpretó el Concierto No. 2 de Dmitri Shostakóvich, con el que obtuvo éxito entre la crítica y el público.

“Después de tocar en el Carnegie Hall, que es también uno de los teatros más conocidos del mundo, pues no deja de emocionarme tocar en otro de los escenarios más famosos, sé que muchos de mis artistas favoritos han tocado ahí y será muy emocionante y divertido”, añade.

En este primer concierto en Bellas Artes, tocará el Concierto para piano No. 8 de Mozart, una “obra muy bonita”. “Lo toco desde hace tiempo, lo conozco bien, me encanta y la elegimos porque se trata de un programa clásico. Además, es una pieza que Mozart escribió cuando tenía más o menos mi edad, 11 o 12 años. Me gusta mucho porque es muy divertido, con un segundo movimiento muy bonito, amo este concierto, llevo tocándolo como dos años, ¿por qué no elegirlo para Bellas Artes?”

Será dirigida por Anatoly Zatin, compositor, pianista, director de orquesta y pedagogo, nacido en Ucrania y nacionalizado mexicano en 1996, director del Instituto Universitario de Bellas Artes de la Universidad de Colima, quien integra el Dúo Petrof con la pianista Vlada Vassilieva; los dos son artistas de Petrof, reconocida marca internacional de pianos; desde hace seis años él es el mentor de Daniela.

“No puedo decir que es más fácil o más difícil ser dirigida por mi maestro, pero creo que sí es diferente porque lo conozco muy bien como director y ha estado conmigo todo el tiempo. Es complicado explicar lo que nos pasa en el escenario, conozco muy bien sus movimientos y si a la orquesta algo le pasa o algo no le sale bien, sería más difícil para mí reaccionar con otro director”, refiere.

Logros

La trayectoria de Daniela Liebman ha ido en ascenso desde que tenía nueve años cuando se convirtió en solista de la Sinfónica de Aguascalientes y la Filarmónica de Jalisco.

Ha tocado en países como Alemania, Italia y Estados Unidos; ganó el primer lugar en la categoría jóvenes del Russian International Music Competition en San José, California, uno de los más importantes en su tipo en el mundo, donde además fue la única latinoamericana ganadora y la primera en la historia del certamen.

En 2012 fue seleccionada para formar parte del concierto que el músico chino Lang Lang dio en Berlín para celebrar su cumpleaños 30, y en 2013 nuevamente fue invitada a tocar junto con el célebre músico en el recital que ofreció en la ciudad de México.

Liebman se dedica a la música desde los tres años; a los cinco comenzó a prepararse profesionalmente. Desde entonces demostró una personalidad que, confía su maestro Anatoly Zatin, la hará única en el mundo de la música.

“Mis padres están muy contentos, están tan emocionados como yo, como cuando nos dijeron que podía tocar en el Carnegie Hall. Agradezco tanto a toda la gente que me ha apoyado y ha creído en mí para ahora estar en Bellas Artes, a donde volveré el 19 de mayo para tocar el Concierto para piano No. 2 de Shostakovich; luego, el 25 de octubre, estaré en el Cervantino en un recital de una hora 15 minutos. Nunca soñé tocar en el Cervantino, pero ahora son puertas que se me han abierto y es increíble”, dijo.

En el Festival Internacional Cervantino interpretará obras de Bach, Beethoven, Chopin, Lizst, Rachmaninov, entro otros. “Estoy practicando muy duro en el repertorio que voy a tocar, sé que van a salir muy bien, algunas las conozco bien y otras las estoy terminando. Para tocar un recital completo se necesitan compositores primarios, algo clásico, algo moderno, algo romántico, en este caso yo no tenía una pieza muy difícil o muy grande de Bach, así que mi maestro me pidió que eligiera una obra y seleccioné la Partitita No. 2 de Bach porque me gusta mucho, la escuché en un concierto y me encantó”, explicó.